Desearía podértelo haber dicho antes, desearía podértelo haber dicho cuando era tiempo, no ahora, no cuando ya está todo perdido. Ahora cuando ya no queda más que recuerdos, sentimientos confusos y este papel, lleno de lágrimas y tinta corrida.
Desearía poderte ayudarte cuando era tiempo, poderte dar lo que necesitabas y nunca pudiste encontrar, consuelo.
Desearía haberme dado cuenta a tiempo aquello que gritabas en silencio, aquello que querías decirme pero nunca supiste hacerlo, necesitabas de mi ayuda, me necesitabas.
Desearía poder abrazarte ahora que se todo y salvarte, salvarte de hacerte daño, salvarte de la muerte, salvarte de hoy, pero no puedo.
Ojala pudiera encontrarte en un sueño, pedirte perdón y darte un último beso, poder cerrar nuestro capitulo o terminar en un final mejor.
Y al final del túnel, solo encuentro tu voz, tu ronca voz al despertarte y aquella que suena como ángeles al cantar, encuentro tu risa, tu respiración, los latidos de tu corazón que me encantaba escuchar cada vez que me recostaba en tu pecho.
Lo único que me queda es tocarte en caricias vacías, imaginarias, frías como mi cama, grande y yo tan pequeña, con espacio de más, espacio entre mis dedos, tocando este tatuaje en mi piel, con tus caricias, con tu recuerdo y con tinta tu nombre, tu fecha, y tus besos en lo más profundo de mi.
Siete años, siete años juntos, sin parar los sentimientos con horarios separados, con años inconcretos, pero amor presente uno por el otro, aquel maldito amor que me atormenta por las noches, aquel amor que no me deja avanzar, solo tú y yo hasta el final.
¿Y qué te puedo decir ahora? Si ya no estas
¿Y cómo puedo tocarte ahora? Si ya no te siento, tú presencia esta fuera de lo que es tangible ahora, tu espíritu solo existe en quienes pudimos conocer tu precioso espíritu.
¿Dónde estás? ¿Dónde te encuentro? ¿Dónde puedo volver a sentirte? Y ¿Cómo quito tu huella de mí? ¿Cómo puedo hacerlo si eres parte de mí?
Desearía que no solo fueras parte de mi pasado, si no de mi presente, y que no solo tu cerraras los ojos despidiéndote de esta vida, de esta fase, si no, lo hiciéramos juntos y pasáramos a ser inmortales, vivir en tu recuerdo y el mío.
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"I'm always sayin' I won't change but
I ain't the same
Everything is different, I can't complain
Don't know what you missin'? Shame on you"- Hurt feelings by Mac Miller
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8 AÑOS ATRÁS
La lluvia por las ventanas y el incontrolable frio, lo de siempre, entre regaños, gritos y lágrimas de todos los días, un "Hijita tienes que comer" y una visita con la señora bascula, seguro está harta de mi como yo lo estoy de ella, quiero simplemente que ella renuncie a mí y yo renuncie a ella, pero mis padres nos hemos casado, una relación toxica, una relación que nunca para. Ojalá pudiera levantarme un día y decirle a mis padres ¡Mamá, papá, buenos días, soy una chica nueva! Y haber ganado el peso que quieren sin la ayuda de mi loca doctora diciéndome que todo está en la mente, pero si lo estuviera, no estuviéramos en este punto, en donde estoy y hasta donde las voces en mi mente me han llevado.
Las mañanas no son mejores cuando no estoy en la ventana, con mis cuatro mantas y un café y a las 8:00 am en punto:
-Hijita, te traje el desayuno, pomelo como a ti te gusta, té de manzanilla endulzado con miel y tostadas, como dijo la nutrióloga, te he traído de las que te gustan – Dijo mi mamá mientras abría la puerta de mi habitación, le sonreí y bajé de la ventana, dejé la taza de café en ella y me senté en la esquina de mi cama, tomé un sorbo del té
-Está delicioso, mami , como siempre, gracias.
- Recuerda que tienes cita en una hora, no tardes en desayunar, necesitamos llegar temprano – me recordó mi mamá aquella torturosa cita con la "loquera" como dice mi hermana, ya lo había olvidado a decir verdad.
- No te preocupes mami, en veinte minutos estaré en el coche – Respondí
- No te tardes – Dijo mientras cerraba la puerta de mi recamara.
Bebí todo el té, en silencio llamé a mi cachorrita para que comiera las tostadas y di un par de mordidas al pomelo, me deshice de la evidencia y me puse mi chaqueta favorita, siento que si la doctora me ve arreglándome y usando lo que me gusta, podría darme de alta más rápido, así que me puse un poco de maquillaje y bajé hacia la cochera y me subí al auto donde mi mamá ya me estaba esperando, manejó 15 minutos al hospital hasta que llegamos.
- Espera aquí hijita, avisaré a la recepcionista que estas aquí, siéntate
- Si, aquí espero – Respondí a mi mamá y me senté en la sala de espera.
- ¿Cuántos años tienes? – Escuché una voz detrás de mí, seguramente las voces volvieron, pero por si acaso volteé a cerciorarme que no fuera producto de mi imaginación y no, no lo era, un chico de cabello teñido color menta estaba detrás de mí.
- ¿Disculpa? – Respondí a su pregunta
- Si, dime cuántos años tienes, porque te ves demasiado grande para que te sigan diciendo "hijita"
- Tengo 17 – respondí apenada.
- Ya estas grande – respondió con su voz ronca y su cara sin gesto alguno
- Discúlpeme señor cincuentón por si tener a mi mamá y que me quiera y no tener que venir sola, como otras personas... - dije sarcásticamente
- No soy cincuentón, pero al menos legal, no como otras,me agradas, soy Yoongi, Min Yoongi.
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Love lost | Yoongi&Tu
Fanfiction¿Donde estas? ¿Donde te fuiste? ¿Como carajos hiciste que me enamorara de ti?