Carrie
Mi vida se volvió un pequeño remolino de cosas que me han pasado últimamente, había dejado mi trabajo, había dejado todo sólo porque había caído a lo más profundo de mi dolor por un hombre que ya no me quería, me veía como una estúpida intentando ocultar cada vez que aparece en mis sueños, su angelical rostro a pesar de notarse tan serio, rudo e intimidante era todo un ángel. Estaba sola en este mundo de gente que no comprende ni lo más mínimo de mi dolor, me ahogue en mi propia miseria, me ahogue en el alcohol y ya ni dormía sólo de pensar, de ver que él estaba con otra mujer que no era yo.
Hoy pensé en mi después de tanto tiempo, había decidido a salir ya de estas oscuras paredes que me hacían poner peor. Saldría con Stef después de tantas súplicas de su parte, acepté, acepté por el simple hecho que la vida sigue no sólo para mí, si no que también para él. Me veo en el espejo no me veía tan mal sólo tuve que ingeniarmelas para que no se notará que tan destruida estaba.
Suspiro, y rogando a lo más alto no encontrarmelo.
-¿Listo? -Pregunta mi amiga parada en el marco de la puerta.
-Si -Dije sin dejar de verme.
-Te ves hermosa -Dice ella sin apartar sus ojos de mi.
-Gracias -Dicho eso nos fuimos.
En todo el camino iba pensando en si me lo encontraba por casualidad, no quería, no estaba lista para verlo.
-Tranquila, si lo ves ¿Cual es el problema? -Escucho decir como si leyera mi mente.
-No, ninguno -Miento, bajo mi vista a mis pies que no dejaban de moverse.
-Entonces, relajate -Dice ella viendome- Oh ya llegamos.Elevó mi mirada que noto un gran letrero de neón alumbrando a la gente parada afuera esperando su turno para pasar. Stef conocía al chico que trabajaba allí de guardia y no hubo problemas para pasar; Lo primero que notó es una gran tarima con un chico saltando al ritmo de la música. Caminamos hacía la barra en busca de algo para tomar, el chico nos sonríe al vernos, pedimos lo que tomariamos. Veo mi amiga ver donde esta la multitud de gente bailando desenfrenadamente mientras toma del basó, yo hago lo mismo pero al notar aquella cara tan familiar, esa figura delante de mi me ahogó debido a eso.
Es Seth —Pensé.
Mi corazón latía tan fuerte, con la mirada de él, me hacía recordar todo lo que había pasado. Tragué, y me siento en el taburete olvidando aquel hombre.
—Hola, señorita Carrie —Oigo decir una gruesa y grave voz.
Lo miré después de tanto tiempo.
—Hola —Dije tratando de sonar lo más tranquila que podía.
—Ha pasado mucho tiempo —Dijo acercándose más —¿Como haz estado? —Pregunta.
—Bien, y tu? —Respondo, estableciendo una conversación.
—Muy bien —Se sienta a mi lado, sin despejar su mirada de la mía —¿Y tu adorado Harry? —Vuele a preguntar, haciendo una sonrisa maliciosa.
En este momento no sabía si decirle lo que en realidad había pasado y que Harry se había ido.
—Pues, no se debe estar por allí —Moviendo mi vista, notó a Stef hablando con un chico tranquilamente riéndose.
Maldije por el simple hecho de que si me pasaba algo, moriría callada.
—Porque me da la impresión de que estas mintiendo —Dice moviendo su dedo como si estuviera pensando.
Mis manos estaban tan frías, y si era así moriría acá mismo por un ataque al corazón.
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Novio Golpeador |En Edición|
أدب الهواة"A pesar de que no quede nada entre nosotros, sigo ilusionada por su vuelta." |Obra Registrada en Safe Creative|