Capítulo: 11 "Nuevos amigos"

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Ambos donceles continuaron su camino entre la espesa niebla, todo estaba en completo silencio, no había calor ni frio, como si estuvieran en la nada, pero al mismo tiempo en un todo.

Al seguir avanzando una ola de carcajadas e insultos inundaron la atmosfera, los discípulos del Clan Wen se burlaban de un joven que yacía en el suelo, sus ojos rojizos a punto de estallar en lágrimas, su rostro tan abatido que al mirarlo daban ganas de ir a consolarlo con un fuerte y cálido abrazo.

El pobre joven con la mirada perdida en el piso y con un cuerpo tembloroso, fue abandonado por sus compañeros de seta, ignorándolo por completo, fue pisoteado y humillado, de una cruel forma.

Al ver dicha escena Wei Wuxian sintió su sangre arder recorriendo por sus venas, sus manos apretadas en un puño, sus nudillos se volvieron pálidos, JiangCheng estaba molesto por el horrible y desagradable comportamiento de los discípulos de la Secta Wen, al ver que aquel chico permanecía igual, acepción de unas cuantas lágrimas que escurrían por sus mejillas.

Al verlo sus corazones se estrujaron, se acercaron lentamente hacia él, pues no querían asustarlo o incomodarlo.

-¿Oye estas bien? – Pregunto Wei Wuxian.

El chico levanto su cabeza, por un segundo un destello de alegría se reflejó en sus ojos.

-¡Wen Ning! ¡¿Otra vez tú?! – Pregunto asombrado y enojado.

- Joven amo Wei, joven amo Cheng, lamento mi desagradable apariencia, no quiero incomodarlos. – Dijo Wen Ning bajando su cabeza.

- ¡¿De qué hablas?! ¿Piensas quedarte tirado todo el día? ¡Levántate! – Ordeno JiangCheng molesto.

Este obedeció, se irguió torpemente y se sacudió la tierra de su túnica.

-¿Y ahora porque te molestaban? – Pregunto Wei Wuxian.

- Fue por mi culpa, se me escaparon los monstruos voladores que había acorralado, me dijeron que yo era el causante por la que mi Secta pierda cara, soy la deshonra de mi secta, soy un bueno paranada, por eso me golpearon y se burlaron, por mi estupidez.

- Infelices, solo son unos idiotas, no les hagas caso, conozco a muchos arqueros, pero ninguno como tú, tu puntería es única, incluso eres mejor que él que está a mi lado.

Al oírlo decir esto, JiangCheng se molestó y le dio un empujón haciéndolo perder por un segundo el equilibrio.

-¡¿A caso quieres morir?! – Grito enojado el doncel de morado.

El doncel de túnica negra con rojo se disculpó con una grandísima sonrisa radiante; Wen Ning sonrió, pues ya se sentía de mejor animo.

Los tres continuaron cazando y desapareciendo monstruos voladores, los tres eran muy buenos, ganando puntos a sus respectivas sectas.

Wen Ning demostró ser un maestro del arco, asombrando a los dos donceles que, al ver su gran destreza y habilidad al tensar y liberar flechas, dando a sus objetivos sin importarle los obstáculos.

El torneo llegaba a su fin, y el trio se separó, ya que debían regresar con sus compañeros y escuchar los resultados.

Wen Ning saltaba de felicidad, fue el mejor día de su vida, pues ninguna flecha fallo y pudo divertirse con sus nuevos amigos, o mejor dicho, con sus primeros amigos.

Se despidió con un abrazo de los ambos donceles, aunque JiangCheng a regañadientes le correspondió a su abrazo, mientras que Wei Wuxian gustoso lo recibió, no notaron que a lo lejos Lan WanJi observaba con el ceño fruncido.

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elvis- Sempai  

El doncel del amor y la cultivaciónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora