Su nave despedazada, el aroma a muerte inundando cada uno de sus sentidos y la imponente figura de Thanos frente a él lo abrumaba, lo enfurecía y, sobre todo... le infringía terror, una sensación de pavor tan intensa que apenas podía mantener la cordura.
Jamás había estado en presencia de un ser tan poderoso. Ni siquiera Surtur o Hela le habían provocado tal sensación. Ni siquiera cuando vio su planeta destruido. Nada se comparan con lo que ahora veía, con lo que ahora sentía.
Sabía que el siguiente en morir era él, cada fibra de su ser lo intuía y estaba resignado a ello, después de todo se avergonzaba por no poder salvar a su planeta y dejar a su pueblo a su suerte.
-Elige- la imponente voz del Titán le hizo mirar a la persona frente a él. Tenía muy claro que no podía confiar en él, lo traicionaría en cualquier momento- El Teseracto o la cabeza de tu hermano... debes tener preferencia por alguno de los dos- de inmediato se encontró con aquellos ojos verdes, fríos y con la amenaza brillando en ellos.
-Adelante, mátalo- ahí estaba. El Loki traicionero y cobarde de siempre. Sintió la decepción recorrerle el cuerpo por milésima vez y de inmediato un agudo y poderoso dolor en el cráneo. Thanos presionaba su cabeza con todo el poder de la gema del infinito, sentía que en cualquier momento le explotaría. Ni siquiera podía pensar en una plegaria a sus dioses para suplicar por su alma, para reunirse con sus padres. Sólo deseaba que el dolor acabara cuando de nuevo escuchó su voz.
-¡Ya déjalo!- aturdido por la presión anterior se sorprendió al ver lo afligido que se veía su hermano ante su agonía.
-I-Igual no importa... el Teseracto fue destruido en Asgard- Loki de nuevo lo miró, esta vez con vergüenza y al extender su mano apareció el objeto que el Titán Loco deseaba.
-¡Eres el peor hermano!- exclamó con odio. Le estaba entregando a ese lunático la única cosa que lo haría invencible. Siempre pensó que su hermano era increíblemente brillante pero ahora lo dudaba.
Mientras se acercaba para entregar el poderoso objeto lo miró con una sonrisa, no la clásica de burla y superioridad, sino una sonrisa de compresión y arrepentimiento.
-Te prometo hermano... que el sol brillará nuevamente sobre nosotros- ¿Qué rayos significaba eso? ¿A caso tenía un plan? ¿Verdaderamente pensaba ayudarlo?
-Buena decisión Asgardiano
-Ah... no soy Asgardiano y además, tenemos un Hulk- en cuanto la bestia verde atacó a Thanos, Loki apartó a Thor unos metros lejos de la pelea.
-Loki ¿Qué estás...?- y de pronto los brazos del pelinegro lo envolvieron creando una ilusión a su alrededor en dónde pudo reconocer su habitación en Asgard con el atardecer al frente.
-No tengo mucho tiempo- dijo Loki mirando hacia atrás, Thor supuso que miraba la pelea real.
-¿Qué haces? Tenemos que ayudar a Hulk
-No- susurró mirándolo de nuevo, con la pena reflejada en su rostro- Tú debes quedarte aquí.
-¿Aquí? Es una maldita ilusión, Loki. No me hagas perder el tiem...
-Escúchame- acarició suavemente la mejilla del rubio, mientras su respiración agitada encubría las lágrimas que amenazaban con escapársele de los ojos- Lo lamento... enserio, por todo. Lamento no haberte apoyado, lamento haber saboteado tu coronación.
-Loki...
-Lo de Nueva York, lo de mamá, lo de Sakaar.
-Espera...
-L-Lamento lo que pasó con Asgard, con Odin, lamento no haber sido... un buen hermano- finalmente las lágrimas resbalaron por sus pálidas mejillas.
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FARVEL
FanfictionEra tiempo de terminar, Loki lo sabía. Habría que despedirse. Los personajes utilizados no me pertenecen. Ésta es una historia con temática Yaoi (chicoxchico).