-Sherlock te aseguro que no sabía que eso ocurriría.
Me desperté en una habitación de un hospital con un dolor de pecho, lo que es raro porque lo último que recordaba era que me dolía era la costilla.
-Que yo sepa el edificio es uno de los más seguros de Londres como es posible que se os colara un zumbado pusiera una bomba y disparara a…
-¡Uhm! ¿De qué estáis hablando chicos?
-¡Oh my dios! Que bien que ya has despertado. Sherlock me abrazo con mucho cuidado.
-¿Tanto estuve inconsciente?
-Temíamos que fuera un coma largo.
-¿Coma? Tan terrible era el dolor de las costillas- los dos me miraron extrañados –bueno ¿Cuándo me darán el alta? Quiero reportar en el blog el caso ¿Qué te parece si le llamo el Tratado?
-¿Está hablando del caso del Tratado Naval?
-Ese suena mejor.
-Cat ¿Qué es lo último que recuerdas?
-Pues cuando Sherlock había resuelto el caso y me empezó a doler las costillas.
-Mycroft ve a llamar al doctor.
Poco después descubrí que fue lo que había ocurrido para acabar en la habitación del hospital y lo que me pasaba. Según el doctor mientras me intervenían en el quirófano para quitarme la bala que recibí en el atentado al edificio donde trabajo cuando no tenemos caso, estuve un tiempo que deje de respirar y mi cerebro dejo de recibir oxígeno.
-Hola querida ¿Intentando recordar? La Señora Hudson entro con un batido de soja.
-Sí, aun voy por el del Rubí Azul, pero no encuentro nada que hiciera que Sherlock y yo nos uniéramos en matrimonio y es más tener un hijo.
-Tranquila, ya verás que te acordaras. Me beso en la frente y se fue dejándome sola.
Rato de irse la señora Hudson entro Sherlock con una bolsa con unos comic de Marvel para mí. Intenta en todo momento que me recupere dándome algún estímulo para mi memoria.
-Cat, será mejor que te tomes un respiro, te traje de tus favoritos, el del tipo de rojo que va con katanas.
-Dead Pool.
-Sí, ese. Los cogí junto al batido y me puse al lado del fuego.
-Buenas tardea pareja- entro Lestrade algo sonriente -¿Cómo andas con esa amnesia? Nada más hacer esa pregunta la sonrisa que tenía Sherlock se borró.
-Me he informado un poco pero sigo sin recordar nada, puede que lo que el caso que le ha traído me ayude algo.
-En si no me trae nada del otro mundo.
-No importa, cuéntelo.
-Verán, llevo con días que algo me lleva por un quebradero de cabeza- se iba sentar a mi lado pero tras mirar a Sherlock se lo pensó y se sentó enfrente de los dos –hace ya unos cuatro días de que me llegó una noticia.
-¿De qué?
-Pues un tal Morse Hudson, un anticuario de una calle humilde- saco el informe –reporto que entraron en su tienda pero no robaron nada.
-¿Qué ladrón más raro?
-No se llevó nada pero si destrozo una figura de Napoleón que tenía en exposición.
-¿Entro solo para eso? Pero eso es sencillo, es vandalismo.
-Eso no creo que solo fuera lo único.
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Poniendo un sociopata en mi vida.
AdventureEsta historia la hice porque a raíz de "Mi Propio capítulo de Sherlock", me estuvieron planteando que hiciera una historia en la que me viera como la compañera de trabajo de Sherlock Holmes, así que en esta historia mí álter ego "3•4•20" que tras se...