☁ꜜ𝚌𝚑𝚒𝚕𝚍【𝚗𝚊𝚖𝚓𝚘𝚘𝚗𝚋𝚘𝚝𝚝𝚘𝚖】

➵다섯

Atención

➵Este capítulo contiene temas que no son aptos para todo público, queda bajo tu responsabilidad leer.

Nam se despertó totalmente asustado, mirando a la nada; su habitación apenas y era iluminada por una tenue luz proveniente de la luna, miro su pequeño reloj digital situado en su mesa de noche, se sentó en cama mirando la puerta; sentía una opresión en su pecho que le dificultaba respirar. Cerro sus ojitos con algo de fuerza, en medio de la oscuridad el pequeño suspiraba tratando de calmar su agitada respiración; cuando se sentía más tranquilo se levanto de su cómoda y calentita cama, para tocar con sus desnudos pies el frío suelo. A un paso lento, cuidadoso y algo torpe a causa del dolor que sentía en sus caderas salió de su linda habitación para ir en busca de su madre, cuando llego al cuarto de esta se lanzo hacia la cama para poder caer sobre su madre; pero ella no estaba allí, sus ojitos se inundaron en lágrimas mientras en voz baja repetía una y otra vez el nombre de aquella mujer que más quería. Se aferro a una de las almohadas que prosiguió a morder ligeramente mientras dejaba que las lágrimas cayeran; ni su nana ni su mamá estaban ¿Acaso había hecho algo malo? ¿Acaso ya no lo querían?.

Los sollozos se hacían cada vez mas fuertes, haciendo que su pecho doliera mas al no tener a nadie quien le consolara.

Escucho dos pequeños golpes para seguido sentir una suave caricia en su cabeza, asustado se volteo; se tranquilizo al ver a su madre la cual le sonreía tratando de calmarlo, estiro un poco sus brazos en señal de que necesitaba un abrazo el cual su madre le dio sin dudar; se aferro con algo de fuerza a la mujer permitiéndose llorar. Mientras la mayor repartía suaves caricias a la espalda y cabeza de su pequeño buscando calmarlo de la seguramente pesadilla que había tenido, sus labios se abrieron y en cuestión de segundos se encontraba cantando aquella canción que había creado para su niño; para la persona que mas amaba en todo el mundo, aquel canto por parte de su madre le relajo, haciendo que su llanto parara por completo y simplemente se encargará de escuchar la canción que más le gustaba, la mayor se separo un momento dejando a Nam sentado en la cama, tomo lo que había dejado en la mesita de noche extendiéndole su adorable taza de Ryan soltando un poco de humo; la bebida aun seguía levemente caliente. Ella también poseía entre sus manos una taza igual a la de su niño, se acomodo detrás de este sintiendo como el ser que más amaba se acomodaba contra su pecho, ambos bebiendo de la leche con miel mientras admiraban las pocas estrellas que poseía el cielo, sin dudar estaban acostumbrados a todos los días ver un lindo cielo totalmente estrellado.