𝓚𝓲𝓷𝓭 •ᴶᵒʰᶰˡᵒᶜᵏ •

5

Sherlock había recibido hoy una de las peores noticias de su vida. Su mayor enemigo, es decir, su hermano estaba saliendo con Greg Lestrade, su único amigo.

Para colmo ambos habían decidido obligar a Sherlock a salir con ellos a celebrarlo.

Aunque en ese momento el chico de cabello rizado apenas podía recordar porque había empezado la noche tan irritado, y es que el cuarto vaso con ese amargo líquido le estaba afectando.

[...]

Un rubio de ojos azules miraba con atención como el chico de pelo rizado mojaba sus labios en alcohol.

Quería acercarse a él y tener una conversación, pero simplemente no sabía por donde empezar.

Se acerco a paso lento pero decidido, no quería perder la oportunidad de estar más cerca de ese chico.

-Hola-logra decir entre el ruido de la música.- Soy John Watson.

Aquella voz suave y amable logro captar la atención, aún más, del joven Holmes.

-Sherlock Holmes.

No iba a malgastar su tiempo en una absurda presentación cuando lo único que quería era tener esos labios junto a los suyos.

Sherlock no sabe que es lo siguiente que pronuncia John porque esta demasiado ocupado fijándose en el color que tienen sus labios tan cerca. Lleva demasiado tiempo pensando en el chico y el alcohol de su sangre no va ayudarlo a rechazar sus instintos.

John frena a Sherlock justo cuando sus narices están apunto de tocarse y se separa bruscamente de él.

- Esto, como decirlo, apenas te conozco y no creo que debamos hacer esto.

- Eres estudiante de medicina, tienes un hermano alcohólico, tú padre falleció cuando eras niños, y quieres ser militar-dice Sherlock de forma rápida.- ¿Ahora puedes besarme, creo que nos conocemos lo suficiente?

- Eso ha sido increíble.

Y es lo último que dice John Watson antes de poner sus manos en el cuello de Sherlock y empujar sus labios contra los del más alto, es un beso explosivo, con un roze salvaje de labios que deja a los dos sin respiración.

- No es lo que la gente suele decir.

- ¿Qué suelen decir? -pronuncia el rubio con la respiración pesada.

-Vete a la mierda.

El último sonido que sale de la boca de John es una carcajada, pues pronunciar otros sonidos después es difícil con la lengua de Sherlock sobre la suya.