Capítulo 22 DILEMA

11.1K 1.1K 21
                                    

Era lunes muy temprano, Gustavo dejó a Lorena en su casa justo para preparar sus cosas e irse a la escuela, él también tenía trabajo pendiente.

_Bien. - dijo él desde la puerta de entrada. _estás en tu casa.

_Gracias. - lo miró con agradecimiento, deseaba hacerlo pasar y permanecer más tiempo a su lado pero era imposible tanto para uno como para el otro.

El tampoco parecía tener muchas ganas de marcharse.

_Me gustaría que pudiésemos hablar más tarde de lo que sucedió anoche. - dijo por fin él.

Ninguno de los dos se había atrevido a tocar el tema durante el viaje.

_De acuerdo. - asintió ella con timidez.

El no pudo resistirse y acarició con delicadeza su mejilla, luego le dio un fugaz beso sobre sus labios cerrados y se marchó.

Ella se quedó observándolo, toco sus labios y sonrió con vacilación, no sabía si estar triste o feliz, ella no era libre para amarlo y tampoco era capaz, no se sentía suficientemente mujer como para estar a su altura, ¿qué podría ofrecerle ella?.

Sus ojos se humedecieron. Su felicidad empezó a transformarse en una opresión en el pecho.

*****
Gustavo trabajo como loco durante todo el día, tenía muchos pendientes pero ese no era el motivo, en realidad quería sacarse de la cabeza el cúmulo de pensamientos que se agolpaban en su mente.

No podía dejar de pensar en lo sucedido con Lorena. Por fin le había confesado sus sentimientos y la había besado, sin embargo no sabía lo que ella pensaba al respecto, obviamente parecía no compartir sus sentimientos y él lo entendía, de hecho lo esperaba, pero el no saber si ella seguiría aceptándolo como su amigo lo tenía al borde del colapso.

No deseaba perderla, se había convertido en algo tan especial, tan esencial que sentía que no podría vivir sin ella.

Estaba dispuesto a ser sólo su amigo si era necesario, no volvería a tocarla si esa era su condición. Haría lo que fuera, incluso moriría por ella.

_Ingeniero. - se acercó Miguel al lugar en donde él se encontraba supervisando. _lo buscan.

El miro hacia la oficina que quedaba, a lo lejos. Su corazón dio un vuelco. Era ella, su figura era inconfundible.

_Hazla pasar. - pidió. _voy enseguida.

Miguel se alejó y él fue directo a lavarse las manos y la cara, había trabajado gran parte de la tarde entre materiales, tierra y polvo, su aspecto no era muy limpio que digamos.

Cuando se hubo limpiado un poco se dirigió con paso firme hacia su oficina.

_Hola. - saludo entrando a ésta. _perdona que te reciba en estas condiciones. - se disculpó.

Ella no pudo evitar sonreír para sí misma, se notaba su incomodidad por su aspecto, sin embargo se veía tan tremendamente atractivo, ella siempre lo había visto tan correcto, tan formal tan impecable, que hoy que lo veía en esas condiciones le pareció más real, mas alcanzable.

De inmediato se sacudió esos pensamientos de su cabeza, el jamás sería alcanzable para ella.

De inmediato sus ojos se entristecieron.

_Discúlpame tú a mí por venir sin avisar. - dijo apenada. _lo que pasa es que es tan tarde y no llegabas, pensé que se te había olvidado.

_Lo siento. No me di cuenta del paso del tiempo. - dijo sintiéndose mal, era cierto, ya era muy tarde. _solo recojo unos papeles y nos vamos.

ESPERANDO POR TI. No. 2️⃣ // SERIE HOMBRES DE LA SIERRA. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora