Alice soltó un suspiro. Había pasado mucho tiempo tratando de concentrarse y las constantes preguntas que le hacían no habían ayudado. Al menos en ese momento estaban todos reunidos por lo que no tendría repetir lo que había alcanzado a ver.
—Estoy segura. No sé en qué parte del mundo pueda estar Macy, pero no llegará a Italia hasta el próximo jueves.
—Nueve días —estableció Edward de forma pensativa—. Tal vez si tenemos la ciudad vigilada logremos encontrarla antes de que los Vulturis la noten.
—¿Y qué sucederá si se dan cuenta de nuestra presencia? —preguntó Rosalie.
—Nos estaremos arriesgando si permanecemos en Volterra por más de un día. Además, no podemos olvidarnos de los nómadas que se acercarán al pueblo —comentó Jasper.
Edward apretó los dientes. No podía estar más despreocupado con respeto al paso de James, Victoria y Laurent por la zona. En realidad, ese tema había quedado pospuesto.
—Prometimos que nos encargaríamos de ellos —recordó Carlisle mirando a su hijo—. Estaríamos arriesgando la vida de Bella y la de los demás habitantes si nos vamos.
—Tal vez consideren incluirnos en ese tema después de todo —intervino Eleazar—. Edward, está más que claro que no tienes cabeza para esto. Una distracción podría ser la diferencia entre una victoria y un fracaso. Si te parece bien, puedo tomar tu lugar e ir con tus hermanos a interceptarlos.
La mirada del inmortal se posó en Alice, quien soltó otro suspiro.
—Podría ser posible. En realidad, no puedo verlo. Es como si algo estuviera interfiriendo...
El timbre del celular de Edward interrumpió a Alice. El inmortal contestó rápidamente después de leer en la pantalla que se trataba de Sam Uley. Se alejó un momento e intercambió palabras breves.
—¿Hay algún problema? —preguntó Carlisle al ver que su hijo se pasó la mano por rostro, en un gesto exasperado, al haber colgado la llamada.
—Los licántropos quieren reunirse conmigo para charlar.
—Debieron haber notado que tenemos compañía desde hace días —contestó Jasper.
—Entonces querrán asegurarse de que mantendremos nuestra parte del tratado —supuso Carlisle—. Les explicaremos que no hay motivo para que se preocupen.
Edward volteó la vista hacia el patio trasero.
—Si ese es el motivo, lo descubriremos pronto. La manada llegará en unos segundos. Les dije que tenían permiso de cruzar la línea del tratado. No podemos permitirnos tener un conflicto con los lobos debido a la falta de confianza.
—Has hecho bien, cariño —manifestó Esme.
Edward abrió la puerta corrediza del fondo en cuanto alcanzó a oír los pensamientos de los licántropos. Esperó a que los lobos adoptaran su forma humana y se vistieran antes de salir al patio trasero.
—Tenemos invitados —señaló Edward en cuanto se dio cuenta de que a Jared y a Paul les había llamado la atención el movimiento dentro de la casa que se distinguía gracias a la vidriera—. Comparten nuestra dieta por lo que no se romperán los términos del tratado. Además, Macy insistió en que estuvieran al tanto de lo que sucede en los libros.
Sam aceptó la explicación por más que no se mostrara muy conforme. Jamás se atrevería a cuestionar las decisiones de Macy. Entonces se aproximó para estrechar la mano de Edward cuando él se la pasó. La relación con los lobos había avanzado lo suficiente para que fuera calificada como cordial.
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EN TUS DOMINIOS 《Fanfic Crepúsculo +18》©
Fanfic(Finalizada/En corrección) Para Edward Cullen sus días en Forks solamente podían describirse como aburridos y eso estaba a punto de cambiar. Macy Steven había heredado un colgante poderoso y, al desear poder conocer el futuro, terminó apareciendo de...