Se está muriendo la Princesa,
En sus ojos ya no hay luz.
Aferrada a un pasado que no la deja respirar, se pierde en el horizonte, pensando en una vida sin ellas.
Las voces le gritan sus errores, y piden a gritos su mente, queriendo apoderarse de su cordura.
Se muere la Princesa, quién siempre fue un héroe aunque la pintaran como un dragón.
Se apaga las luz de sus ojos, miéntras sonríe para los demás, se pierde en sus sueños los cuales la atormentarian por siempre.
Si se muere la Princesa las rosas ya no florecerán, porque el rojo de sus labios ya no está.
Se va y nadie la detiene, porqué la Princesa fue pintada como el dragón y los dragones se consumen en su propio fuego sin posibilidad de ser salvados.
Se muere, porque nadie supo entender su mente. Se va porque quiere llegar al jardín de rosas donde a pesar de sus espinas ella entiende que hay que amar por pétalos y espinas.
Se fue la Princesa, sin decir nada gritando auxilió.
Abrió los ojos y encontró las rosas.
