FINALIZADO.
Breves relatos con un pequeño toque de realismo mágico, cada uno de ellos representa una etapa del autor en sus últimos años. Lo que mi alma dice recoge historias tristes, de amor, de auto reconocimiento y superación. Momentos propios d...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Vidas
Me parece que estaba bien. Fue lo último que vi en él. La mirada perdida, los trotes pausados, y la cabeza gacha decían todo lo contrario. Por tiempo lo vi desfilar, detrás siempre dejaba el rastro de su pesada aura. Me parecía verlo llorar, un llanto interno imperceptible. A diario lo veía llegar, de frente, ojos vacíos, pisadas endebles. Como un recipiente vacío sin rumbo, inerte a los vientos, aunque ninguno le favorecía. Venía como de otro tiempo. No tenía reflejo alguno su humanidad. La única sombra que lo acompañaba parecía ser un pasado muy resistente. Adoraba caminar bajo la lluvia, eran como miles de lucecitas prendidas bajo la luna. Nubes y polvos de la noche. Cada vez me asombraba más, con cada día aparecía más despierto, más sereno, más vivo, con más color. Sus pupilas eran marrones, fuertes como el cuerpo de un árbol, arraigado cada vez más en sus poesías. La última vez que me vi sobre una vidriera caminando, recordé que era aquel gris sin palabras.
____________________
Noche en los ruidos
En ocasiones tenia la sospecha que siempre pude ofrecer más de lo que creía tener. Escucho voces a lo lejos, sirenas ambulantes, perros ladrar al vacío infinito de la noche. Miro el negro oscuro del cielo y veo parpadear a la distancia brillitos cercanos. Digo, parecen estar arriba, pero en realidad están más alto que arriba. Corren los vientos en desopilantes olimpiadas, nunca saben donde van, pero en pequeños momentos dejan caer alguna brisa mientras observo aquellos brillitos inquietos. Los autos van y vienen. Los escucho también. Uno puede sentir que la noche es tan serena y pacífica, pero es una hostil melodía al eco de nuestros pensamientos. Solo hay que dedicarle atención, y los sonidos más recurrentes atinan nuestros oídos. Sigo maravillado observando el firmamento, busco no encontrar una estrella fugaz para pedirle el deseo que jamas quisiera pedir. El anhelo de los lugares felices. En ocasiones, tengo la sospecha que soy feliz con tan poco sin saber que mi poco es tan todo para ti. O para mí.
____________________
Dureza corteza
Su corazón me sorprendió. Es pequeño, muy misterioso, envuelve un halo de luminiscencia que nunca antes había visto. Y sin saber cómo es realmente, ello me inspira. No imagino como despertará cada mañana, que secretos reposan sobre sus impenetrables cimientos. Cuántas estrellas nacen de ese motor. Tiene las raíces fuertes y fuerte tiene el color. Creando transforma y cantando respira. Desune lo innecesario y apega los abrazos verdaderos, los venideros. Aquellos que osan intentar destruirlo a menudo se encuentran con la penosa tarea de luego curar las heridas que provoca la inmensidad de su impasibilidad. Presume que nada puede tocarlo. Es cierto, y cuando sucede su órbita se descontrola en un espectáculo de bailes errantes. Sin sentido. Así era yo, o así al menos contagiaba. De ponerme a pensar, evoqué el eco de mis incertidumbres. Mis sueños, que hoy, no son más que una corteza en letargo para echar raíces.