¿Te quedarías a mi lado? {Caché}

Cap 35

Salimos de la cafetería, aún seguía con mi café, nos montamos en el auto y nos dirigimos a su departamento, suponía

-¿Qué quieres hacer la señorita?—Pregunto Mónica sin sacar la mirada del camino

-¿No vamos a tu casa?—Pregunté de vuelta mientras aún tomaba de mi café

-Sí, pero en mi casa pues.

-Coger—Termine mi café y puse el envase en el porta vasos, me incline hacia el reproductor y puse algo de música

-Deja de decir eso ya Majo.

-¿Porqué?—Reí— ¿Tantas ganas tienes?

-¿Nunca podremos estar sin discutir?

-Bueno, bueno, me callo—Miré por la ventana y me puse a tararear las canciones que pasaban

-Cantas bonito—Me interrumpió—Otra cosa que me entero de ti

-Gracias, gracias—Respondí y seguí cantando, al poco rato me siguió y nuevamente las dos estábamos cantando cada canción a todo pulmón.

**

Llegamos a su departamento, cerró la puerta a sus espaldas y me tire en el sofá, ella se quito su chaqueta, la dejo en la mesa y fue a su cocina... Saque mi celular y me encontré con unos mensajes de la chica de esta mañana, gire los ojos, ya me arrepentía de habérselo dado, sin embargo de le respondí:

-Hola Majo, solo quería saber que haces

-11:35 a.m.

-Cuando quieras me llamas

-12:40 p.m.

-¿Majo?

-1:35 p.m.

-Hola Alejandra.

-2:50 p.m.

Fue lo único que escribí y presioné enviar, Mónica regreso con dos vasos de jugo y se sentó a mi lado, encendía el televisor y se dispuso a buscar una película, bloqueé mi celular y lo deje a un lado, no quería otra escena de celos de su parte

-¿Entonces?—Pregunto— ¿Cómo planeas separarlas?

-No sé—Me recosté y puse mis pies en una mesita que estaba al frente de nosotras mientras terminaba el jugo—Pero sé que lo haré, tengo que hacerlo.

-¿Y si no lo logras?—Termino su jugo y dejo el vaso en la mesa donde tenía mis pies, reí

-¿De verdad crees que no lo logré?—Fui irónica

-¿Y si te enamoras de ella? ¿No lo has pensado?—Me miro

-¿Qué puede haber en ella que me enamore?

-Ah no sé—Se encogió de hombros—Pero puede pasar—Desvió su mirada de mi a la pantalla del televisor

-No va a pasar nada—Termine mi jugo y puse el vaso también en la mesa—Lo único que va a pasar es que ella se va a alejar y no me va a joder más la vida

-¿Por qué no puedes enamorarte?—Esa pregunta estaba fuera del tema, lo dijo sin sacar su mirada de la pantalla del televisor

-No me lo permito—Volví a recostarme del sofá

-¿No te permites amar?—Se acostó en mi pecho, negué con la cabeza y la deje

-Eso es para estúpidos

-¿Por qué piensas así Majo?—Su mirada volvió a mí, está vez yo desvié la mirada

-Ya sabes el por qué.