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—Agradezco ser rico —dijo JiMin, haciendo reír nuevamente a la pelirrosa.
—Y yo agradezco que seas rico; pero, en serio, no hace falta que tú compres todo —JiMin negó con la cabeza y la miró mal— Jeje. De acuerdo, te dejaré pagar todo —JiMin sonrió y asintió, de algo le servía ser rico.
—Ahora, sígueme —JiMin la agarró de la muñeca y la llevó a una peluquería—. Te quitarás ese color. Desde ahora, tendrás tu color natural, era bonito, no entiendo por qué te lo quitaste.
—Buenos días, jóvenes —dijo la amable peluquera—. ¿Desean algo?
—Sí. Ella. ¿Puede volverla a su color natural? —la peluquera negó.
—Pero podemos teñirle el cabello de su color natural —dijo la peluquera.
—Mhm, no, sería lo mismo. Podría seguir dañando su cabello —dijo JiMin, no tan convencido con la propuesta.
—Pero... tenemos un tratamiento especial para que el cabello no se dañe y que no tenga que venir todos los meses a teñirse de nuevo. Ese podríamos usar con ella. Es como una especie de tinte permanente —JiMin asintió repetidas veces—. Bien. Señorita, pase por aquí y siéntese &la pelirrosa hizo caso y se sentó.
Empezó con su trabajo. Agarró el tinte para cabello y comenzó a teñir el cabello de Hyun. JiMin miraba y esperaba a su amiga con una sonrisa, mientras leía una revista y tomaba un café.
La peluquera sonrió al notar lo linda que se veía la chica con su cabello natural. La, ahora pelirubia, sonrió al volver a ver su antigua ella en el espejo de la peluquería.
—Te ves muy linda —halagó la peluquera.
—Muchas gracias —sonrió—. Jiminnie. ¿Nos vamos? —JiMin movió su cabeza, negando con ésta, a lo que Hyun Hee le dedicó una mirada confundida.
—¿Podrían hacerle un tratamiento en la cara para el acné? —la peluquera sonrió y asintió—. Bien. Nos iremos cuando terminemos con todo tu rostro —dijo JiMin sonriente.
—Jiminnie, no es ne-... —JiMin la miró mal—. Está bien. Pero me dejarás pagar un helado cuando terminemos —JiMin asintió y sonrió.
Vinieron estilistas. Hee estaba nerviosa, nunca había estado en una especie de spa. Las estilistas empezaron a lavar la cara de la pelirubia, comenzaron a echarle cremas y líquidos extraños. Una vez hecho eso, agarraron una crema de frutos rojos junto con una de aloevera, se las aplicaron en la cara a Hyun Hee.
—¿Hace cuánto que no haces esto? —preguntó una estilista mientras exprimía limones en un algodón.
—Nunca lo he hecho, esta es la primera vez que lo hago —dijo un poco nerviosa.
