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¿Comienzo? (21)

El rostro de Myeong y el de Bambam se encontraban muy cerca, era obvio lo que iba a pasar. La chica por su parte se dejó llevar por el chico y acabaron besándose.

—Que bonito.

Se escuchó una voz femenina y chillona de fondo.

De pronto los dos se separaron y vieron a la pareja en la entrada de la plaza.

«Mierda, ahora estoy condenada», pensó Myeong refiriéndose a su amiga ya que de seguro esta le iba a molestar.

—Nosotros nos vamos yendo... —Yugyeom cogió del brazo a Hee Sook y se la llevó deprisa del parque.

La chica al parecer no puso ninguna pega.

—Tu amiga te va a molestar ¿Cierto? —preguntó Bambam con una voz nerviosa.

—Ah... sí —dijo desconcertada ya que no sabía muy bien que acababa de pasar.

Bambam al ver que la chica estaba confusa perdió toda la confianza en lo que hizo.

—Perdón, quizá no debería haber hecho eso —dijo arrepentido.

—No te preocupes. —Myeong le dio un beso corto en la mejilla ya que este estaba de perfil.

El chico ante eso se ruborizó mientras miraba a Myeong.

—Vaya. —Sonrió algo avergonzado.

Hubo un silencio de unos segundos, pero rápidamente Bambam lo rompió.

—Myeong —dijo con firmeza.

De pronto el móvil de la chica comienza a sonar y por culpa de la musiquita de este al chico se le va toda la confianza.

—¿Si? —Myeong contestó la llamada.

—Hola Myeong —habló Jongsuk a través del móvil.

—Hola, ¿Qué pasa? —preguntó la chica.

—Hace tiempo que no nos vemos, ¿Quieres quedar mañana?

—Venga va, pero yo te aviso mañana a que hora y demás, ahora estoy en la calle —contestó Myeong.

—Vale, hasta mañana. —El chico colgó la llamada.

—Parece que Yugyeom y Hee Sook se fueron, quizá deberíamos irnos nosotros también —comentó el chico.

—Sí.

Los dos se marcharon a sus respectivas casas. En el trayecto en bus apenas se hablaron, pasó igual en el camino a pie. Ambos estaban un poco tímidos por lo que acababa de suceder.

•

Al día siguiente Myeong aún no podía creerse que Bambam le había besado, lo veía como algo que sólo pasaba en lo doramas.

Hoy en la tarde quedaría con Jongsuk y le comentaría lo que le pasó con el chico.

•

Una vez que llegó la hora de reunirse con el chico Myeong intentó explicarle a este todo sobre el tema de Bambam y sobre el beso.

—Entonces a ti te gusta él y sospechas que a él le gustas tú ya que te besó anoche ¿No? —comentó algo dudoso.

—Exacto. —Afirmó la chica.

—No creo que ese chico bese por besar, seguramente también le gustes.

Él no me ha dicho nada en verdad —dijo indiferente.

De pronto un pensamiento vino a la mente de la chica.

—Justo cuando me llamaste él me iba a decir algo —comentó Myeong.

—Vaya. —Jongsuk se rascó la nuca y añadió—: Quizá se te iría a declarar en ese momento. Perdona, arruiné el momento. —Sonrió culpable.

—Da igual, pero espero que me diga algo.

—¿Cuándo volveran a quedar? —preguntó con curiosidad.

—No sé —contestó.

—Pues cuando se vuelvan a ver sácale el tema. —Sonrió.

—¿Cómo?

—Uf... es complicado, pero se puede hacer. Me dijiste que Hee Sook y su novio os vieron, puedes hacer que ella te llame o que te vea de "casualidad" en la calle con él y saque el tema.

—Uf. —Frunció el ceño con molestia.

—¿Por qué esa expresión? —preguntó con curiosidad.

—Créeme, conozco a Hee Sook —contestó.

La chica ya se podía imaginar lo que pasaría si su amiga le ayudase en esto.

—Habla con ella, seguro que sabe como ayudarte —dijo con una leve sonrisa en los labios.

—Será, aunque espero que no sea muy cantosa.

—No tranquila, seguro que es discreta si se lo explicas.

•

Pasó una semana y Myeong no tenía noticias de Bambam y viceversa. En verdad podían haber quedado pero ninguno le dijo al otro de quedar debido a que estaban algo avergonzados de lo que pasó aquella noche.

Narra Bambam:

Había pasado cerca de una semana desde que no veía a Myeong, recordemos que la última vez que nos vimos fue bastante especial ya que... nos besamos.

Yo realmente quería verla y aclararle lo que no pude decirle ese día ya que no le dije porque me acojoné siendo claro.

Hoy tenía pensado armarme de valor e invitar a Myeong a dar un paseo después de lo que pasó.

Cogí el móvil y decidí llamarla.

Primer pitido.

Segundo pitido.

En estos momentos estaba decidido y seguro de lo que iba a hacer, pero eso no quitaba que estuviera nervioso.

—¿Si? —Escuché la voz de la chica.

—Ho-hola Myeong. —Mi voz comenzó a temblar.

—Hola Bambam ¿Pasa algo? —preguntó.

«¿Cómo puede estar tan normal después de lo que pasó?», pensé.

—¿Bambam? —dijo mi nombre.

——¡Ah sí! Am, ¿Esta tarde quieres ir a dar un paseo? —pregunté.

—Vale. —Aceptó.

—A las 18:00 te recojo —dije.

—Vale, bye.

—Hasta luego. —Sonreí inconscientemente y colgué.

Ahora sólo tocaba esperar hasta la hora acordada.