Una historia en Nueva Orleans

Nuevo comienzo

Capítulo 1

Emma se encontraba en el aeropuerto cansada después de dos horas de vuelo y ansiosa por saber como seria su nueva vida en Nueva Orleans , tomo un taxi y le dijo al chofer que la llevara a un
lugar donde pudiera quedarse mientras se adaptara a la cuidad,luego de una hora de transito llego a su destino, el chofer la llevo a una pensión que se situaba en el
centro de Nueva Orleans.

Emma Fomin.

-Hemos llegado señorita- dijo el chofer estacionándose frente a la pensión.

- Muchas gracias señor- agradeció y se encamino dentro del lugar.

Era una pensión muy bonita y colorida la casa era de dos plantas pintada de un color azul cielo, aunque en realidad no me agradaban ese tipo de colores tan claros, luego de un suspiro de cansancio por verme obligada a vivir con personas desconocidas deje mi equipaje a mi lado y golpe levemente la puerta del lugar, luego de unos segundos una chica abrió la puerta con una sonrisa que por alguna razón me molestaba, ¿Que era tan gracioso? me vi obligada a dedicarle una pequeña sonrisa que no tardo mucho en desaparecer, la chica era un poco mas alta que yo y tenia el pelo en una cola de caballo, ojos marrones, vestía una camiseta holgada y unos jeans negros junto a unos converse blancos.

-¿Eres... Emma Fomin?- Pregunto curiosa mientras yo asentía sin decir palabra alguna.

-Pasa- Ofreció la chica abriendo mas la puerta y indicándome que entrara y así lo hice dejando mi maleta en la sala de la casa, era un lugar algo acogedor excepto
por los diferentes colores claros del lugar pero no hice comentario alguno cuando la chica se acerco a mi.

-Soy Zoe Bass, tu habitación esta en la segunda planta al final del pasillo, pronto conocerás a los demás - Dijo y me entrego unas llaves que supuse que eran de la casa y
de mi habitación y se marcho a la cocina o eso creo, tome mis cosas,subí los escalones sin prisa alguna y camine por el pasillo mirando las dos diferentes
puertas cuando una de estas se abrió golpeándome el rostro "genial" pensé retrocediendo mientras frotaba la zona golpeada.

-Seria muy bueno si te fijaras- Dije cortante mientras este me miraba fijamente escaneandome con la mirada, suspire y seguí mi camino mientras el chico me
llamaba disculpándose, abrí la puerta de la habitación y entre cerrando la puerta, deje mi equipaje en la cama y me dedique a inspeccionar el lugar con la mirada,
la habitación era agradable, estaba pintada de un rojo vino oscuro, un escritorio, un baño un poco pequeño y lo que mas me agrado el gran ventanal blanco
en el cual se podía ver una parte del vecindario y algo de la ciudad, abrí mi maleta y busque mi celular en mis bolsillos pero cuando lo prendí no tenia batería,busque mi cargador en mi maleta y lo conecte mientras me desvestía para tomar una larga ducha.

Salí del baño envuelta en una toalla que habían dejado sobre la cama junto con algunas mantas y jabones, busque un pijama en la maleta, me la coloque,
peine mi cabello y salí de la habitación por algo de comer, moría de hambre y se suponía que el pago de la habitación ocupaba todos los gastos incluyendo el de la comida y demás, camine a lo que parecía ser la cocina ignorando a los presentes que se encontraban en la sala conversando y riendo
con el chico que me golpeo hace un rato (por lo que tenia entendido aquí viven dos chicas y un chico que supuse que era el y los demás eran visita), todos los presentes callaron y me sentí algo incomoda pero para nada intimidada, abrí el refrigerador y tome una tarta que decía mi nombre, fruncí levemente el seño y me serví una porción junto con algo de jugo de naranja, escuchaba varios susurros a los cuales les reste
importancia.

Tome asiento en el comedor que estaba algo cerca de la cocina y comí en silencio, pero ese silencio no tardo en desaparecer cuando dos de esos chicos se sentaron a mi lado, seguí comiendo ignorando su presencia.

-Hola linda- Dijo el chico castaño con ojos negros, tome el jugo de naranja y le di un pequeño sorbo ignorando su saludo, no estaba de humor para hablar con alguien casi nunca lo estoy pero así era yo o por lo menos así es desde hace un tiempo.

-¿Te comió la lenguea el...?- Esta vez hablo el otro chico con pelo negro y piel pálida, pero lo interrumpí.

-¿Por que mejor no te pierdes?- Dije harta de tonterías y me levante llevando mi plato a la cocina mientras los otros chicos se burlaban del chico, lave mi plato y me dirigí hacia mi habitación.

-Que temperamento para alguien tan linda- Me grito uno de los chicos mientras yo subía los escalones,rodé mis ojos por las veces que me lo habían dicho,entre en mi habitación y arregle mi ropa en el closet, al terminar estaba mas que cansada así que tome mi celular revise algo sobre la universidad,
apague la lampara y me acomode en las mantas mientras suspiraba al pensar en la molesta situación de estar en una ciudad completamente distinta a la que me crié,
cerré mis ojos los cuales se hicieron pesados luego de unos minutos y me quede dormida.
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Esperó que les guste esta historia y le den mucho amor, besos.

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