Teenager

You will be mine

-Ah~ Ah~ No pares, Hyung~
Aquellas palabras junto con gemidos y el choque de dos cuerpos era lo único que se escuchaba en aquella sala que se suponía era para "reuniones" de profesores, en esta sala se encontraba aquel rubio tirado sobre el gran escritorio mientras un chico de cabello castaño lo embestía con fuerza.

-Luhan, Por dios~
Jimin gemía con fuerza aferrándose a la gran mesa que tenía debajo de el, Luhan era su ex-novio pero aún así seguía cayéndo a sus pies como todo joven que estudiaba en aquella escuela.

-No se por qué eres tan bueno, además tu trasero me llama, es tan hermoso~
Luhan daba estocadas fuertes y precisas en el punto del menor, sabía cómo satisfacer a aquel pequeño, al final no era la primera vez que lo penetraba, ya había perdido la cuenta.

-Maldita sea, Luhan. Te detesto tanto por hacerme gemir de este modo~
Soltó una leve risa mientras decía esto y miraba al mayor, Jimin era atrevido y demasiado sensual, nadie se resistía y el con gusto podía llevarlos a su cama.

-Se que me amas, no puedes vivir sin mi-
El mayor soltó una leve risa para después venirse en el interior del chico, salió con el máximo cuidado y tomo su celular para tomarle una foto, no podía perder un recuerdo de aquella vista.

-Hyuuung~ No hagas eso dentro, cuando comienza a salir se siente raro-
Jimin sonrió y se acomodó mejor mientras el mayor le tomaba múltiples fotos.
-No deberías tomarme fotos cuando tú esperma sale de mi trasero, maldito pervertido...-
Suspiro y tomo su ropa para vestirse y salir de ahí, no eran más que una simple ex-pareja pero para Jimin, Luhan no era nada, el era lo mismo que las otras dos o tres personas con las que lo hacía cada vez que se le venía en gana, era su juguete para satisfacer sus ganas o un sirviente más.

-Jimin...-
Luhan suspiro y fue detrás de el mientras se vestía todo apurado.
-Jimin, yo me iré a otro país, acabo de hacer un intercambio y en definitiva tendré que irme...-

Jimin se detuvo y volteo a verlo para después reir.
-¿Disculpa? ¿Quien me acompañará ahora?-
Estaba levemente enojado, no por qué se iba si no por qué ya no tendría un "sirviente" más.
-¿Sabes lo díficil que es encontrar a alguien como tú?-

-Claro-
Luhan soltó una leve risa y acarició las mejillas del pequeño.
-Puedes decirle al chico que tomara mi puesto aquí, pero claro, creo que no será tan bueno en todo como yo~

Jimin arqueo la ceja y comenzó a reír con fuerza.
-Luhan, cualquiera es mejor que tu-
Sonrió y beso la mejilla del chico para después ir a casa.
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Park Jimin, el chico más popular en la escuela gracias a su hermoso y envidiable cuerpo, tenia a todo alumno y profesor en sus manos, podia controlarlo todo a su gusto si quisiera.

De igual forma, Jimin no era aquella perla brillante que todos amaban, Jimin era una persona arrogante, manipuladora y completamente despreciable pero nadie lo notaba ya que todos caían ante sus encantos. No todo fue así desde el principio, simplemente las personas cambian por un giro muy drástico en su vida y ese giro lo tuvo jimin justo cuando necesitaba más ayuda.

A los 7 años, Jimin tuvo un accidente de auto junto a sus padres y hermanas, sus padres murieron y sus hermanas olvidaron todo lo que pasó pero lo peor... Lo olvidaron a el.

Jimin no sabía que hacer, la impotencia que tenía era muy grande, el no poder ayudar a sus hermanas y el vivir con solo una pregunta en su mente lo mataba lentamente...

"¿Por qué no me pasó nada a mi?"

Eso se preguntaba jimin todos los días mientras veía a sus hermanas recuperarse en el hospital y a sus padres en el cementerio, ¿Por qué no a mí?, Esa era la curiosidad y única cosa que queria saber.

Gracias a todo esto, jimin creció pensando en que al perderlo todo era mejor disfrutar su vida, no iba a preocuparse por lo que hacía, al final, todo lo que amaba realmente ya no estaba, todos los hermosos recuerdos con sus hermanas, ellas no los tenían, ni siquiera podía compartir un momento con sus padres, por qué no estaban, Jimin no tenía nada y a nadie, simplemente era un adolescente con ganas de mucha atención y haría lo que fuera por tenerla.

Claramente, cuando supo que su cuerpo podía hacer maravillas, no dudó ni un segundo en convertirse en una persona despreciable por solo un poco de atención, el sexo se hizo presente en esto y fue algo encantador para Jimin, ese acto donde solo el era la fuente de atención era lo mejor, en si, si era un poco desagradable pero que importaba, ser el centro de atención es lo mejor.
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-Jimin-Ssi... Luhan se fue ¿Ahora que harás?-
Comento aquel pelinegro que estaba sentado junto a Jimin mientras almorzaban.

-Nada, no era relevante para mi-
Jimin suspiro y siguió comiendo como si nada mirando hacia la puerta, le incomodaba mirar a otras personas que babeaban por el.

-Jimin, ¿Enserio no haras nada? Sabes que los otros dos que te hacían eso también tomaron alas, estás perdiendo tu toque, nadie te va a querer como antes... Te volviste muy... Agresivo..-
Suspiro y acarició su cabello un poco mientras Jimin lo miraba con despreció, ¿Nadie lo iba a querer? Ja, que estúpido.

-¿Cómo crees que eso va a pasar? Tu novio estaba enamorado de mi antes, no puedes negarlo, Jungkook...-

-Yugyeom no te amaba, simplemente le atraias físicamente como a todos aquí, nadie te ama realmente, los únicos que lo hacían, los dejase ir...-
Jungkook rascó su nuca un poco.

-¡Claro que no los deje ir!-
Se levantó de su asiento y lo miro aún más molesto.

-Jimin, Yoongi y Taehyung se fueron con otras personas...-
Señaló aquella mesa donde estaban los chicos comiendo con sus parejas, se veían sonriendo felices, la historia con jimin había acabado, tenían una nueva historia con personas mejores y diferentes.

-No saben de lo que se pierden...-
Jimin suspiro y lanzó su almuerzo a un lado sin importarle nada.

Jungkook se asustó al ver el rostro de un joven detrás de jimin, estaba molesto y eso se notaba.

-Disculpa pequeño, no debes tirar la comida...-
Dijo aquel joven mientras limpiaba su saco. Jimin volteo a verlo y comenzó a reír al verlo todo lleno de su comida.

-Oow, lo siento mucho, ¿Te lastime, princesa?-
Dijo con burla mientras miraba como se limpiaba.

-La princesa aquí eres tú por lo que veo, una princesa que teme por su corona y por eso es una tirana...-
El chico levantó su rostro mirando a Jimin con el mismo desprecio que Jimin miraba a jungkook hace unos segundos, esa mirada hizo temblar a Jimin, algo tenía aquel joven, algo que nadie más podía tener nunca y eso quería Jimin. Jimin lo quería para el y solo para el.

-No soy una princesa, pero puedo ser la tuya~
Sonrió y se acercó a él mientras movia sus caderas.
-Soy Park Jimin...-
Lo abrazo de la nuca y mordió su labio.
-¿Tú quien eres, lindura?-

-Me llamo Kim Namjoon y adivina qué...-
El chico tomo las caderas del menor para después sonreír y acercarse a su oído.
-No me interesas en lo absoluto, perra...-
Susurro mientras sonreía para después separarse e ir a pedir su almuerzo.

Jimin se quedó estático al escuchar todo eso, no podía creer que alguien lo insultara y menos que lo rechazara; volteo a ver a aquel moreno y suspiro, el tenía que ser suyo a toda costa, el era el único que lo hacía sentir seguro, aunque apenas lo conociera, se sentía bien con el a su lado...