Imaginas Multifandoms

93.-PERCY JACKSON

Sofía solía viajar todos los fines de semana a la casa de al playa que tenían sus abuelos.

Si había una cosa que le gustaba más que el agua era la puesta de sol y su precioso color.

- Mami, mami. Quiero ver los peces- Le pidió a su madre cuando tenía 8 años.

- Ahora no, Sofía- Le negó la mujer sin prestarle realmente atención. Estaba concentrada en el correo que tenía que enviarle a su jefe. Y por culpa de esto no vio como su hija corría hacia la orilla de las cristalinas aguas.

Se sumergió bajo el agua y observó a los animales. Sin embargo salió a la superficie poco después profiriendo un grito al ver aquella monstruosa cosa que se acercaba a ella.

Un chico que nadaba bajo la atenta mirada de su madre se acercó a ella al escuchar sus gritos.
Sin saber como, ambos chicos sintieron como el mar les separaba de la bestia. Hasta mucho después no descubrieron que había sido el chico con su control sobre el agua.

Aquella fue la primera vez que Sofía vio un monstruo. Y aquel día conoció al que sería el "amor de su vida" según sus propias palabras. Pues tras presentarse descubrieron que podían llevarse genial y rápidamente se convirtieron en amigos.

Aunque cada uno vivía en una ciudad diferente, todos los fines de semana se encontraban en aquella playa donde se conocieron.

La madre de la chica, cansada de tener que traspasarla de colegio cada poco tiempo, le contó la verdad sobre su padre cuando cumplió los 12 años y la mandó al Campamento Mestizo, donde vivían los de su "especie".

Por culpa de su mudanza no pudo volver a la playa, así que se sintió realmente mal por haber abandonado a Percy.

Poco después fue reclamada por su padre, Apolo, y descubrió que estaba bendecida por Poseidón.
Sin embargo, su tristeza se esfumó al ver a Percy entrar seguido por un sátiro y con un cuerno en la mano. Sofía corrió a su encuentro en el mismo momento en el que el chico desfallecía, cayendo redondo al suelo.

La chica le explicó a Quirón que le conocía de antes, por lo que el centauro la dejó a cargo del cuidado del recién llegado.

La chica no se esperaba que Percy fuera un semidiós, pero lo cierto es que se alegraba. Así podrían estar más tiempo juntos.

Cuando el ojiverde despertó definitivamente se encontró a la chica sentada en una silla junto a su camilla.

- ¿Sofía? Creí que eras un sueño- Susurró, haciendo referencia a que había visto su cara durante los pequeños momentos de consciencia.

- Ya quisieras- mencionó ella con algo de gracia. Percy sonrió, pero fue perdiendo la sonrisa al darse cuenta de que entonces su madre de verdad había muero a manos del minotauro.

Unos días después, Percy, que había descubierto que era hijo de Poseidón, recibió un aviso de Hades. Si le entregaba el rayo robado de Zeus, él a cambio le devolvería a su madre.

Sofía amaba a Sally Jackson, era la mujer que la había tratado como una madre por cuatro años, mientras la verdadera se encontraba ocupada con el trabajo.
Debido a esto, al saber que Percy iría al inframundo, decidió acompañarle. Se les unieron Grover, el sátiro y protector de Percy, y Annabeth Chase.

-Perseus Jackson, deja de jugar con la comida y cómetela de una vez- Le regañó Sofía al ver como su novio se dedicaba a montar batallas con su Nuggets de pollo con forma de animales.

- Si, mama- Contestó con burla el ojiverde.

- Idiota- En teoría ella no debería estar en la mesa de Poseidón, pero Percy siempre estaba solo y ella tenía la excusa de estar bendecida por el dios del mar.

-Me alegro de que consiguiéramos salvar a tu madre.- Le dijo cuando ambos se encontraban sentados en la playa que había tras la cabaña del chico.

-Yo también, y me alegro de que todos consiguiéramos salir del inframundo.

Sofía sonrió de nuevo y se abrazó a su novio mientras ambos observaban la puesta de sol sobre la superficie del agua.