Experiencia anónima

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Todo comenzó con una simple broma que trajo terribles consecuencias para mí, no fue mi intención hacerle daño, pero con el tiempo esa persona se sintió mal.

Después de todo el problema anterior, las amigas de la “victima” empezaron a acusarme de hacer que casi se mate, y que fue mi culpa todo lo que ella llegó a hacer; esto no me lo decían directamente, sino por medio de una aplicación de mensajes anónimos.

Estos mensajes llegaron a ser más constantes, tanto que llegaron a escribirme diariamente, no solo mencionaron a la “victima” en esos mensajes, también mencionaron a mi familia y eso me lastimaba mucho.

Cada mensaje me hacía sentir como una horrible persona, me hacía odiarme a mí misma y llegar al punto de querer acabar con ella.

Esto me paso por guardar silencio y no decir nada ni pedir ayuda, pero por parte esto también fue mi culpa por comenzar con algo que yo considere una simple “broma”, fue una etapa muy dura de mi vida quería que se acabara.

Esto duro casi 3 meses, los mensajes seguían llegando, pero decidí hablar con las posibles personas que hacían esto, no las acuse después de decir cómo me sentía. Finalmente todo acabo y aprendí mucho acerca de lo sucedido, solo puedo decir que debemos ser responsables de nuestros actos y que esto se quedara grabado en mi memoria.

Las Redes Sociales Y Su Impacto En La Salud Mental De Los Adolescentes.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora