18 · Un viejo amor

430 61 13
                                    

Salí aturdida de la reunión con Kakashi-sama. Tendremos que reunirnos con Sasuke mañana por la tarde y el nos dirá los demás detalles de la misión.

- Ino - grito Sakura desde la puerta del edificio. Intente ignorarla pero ella corrió hasta quedar frente a mi - Espero que a tu regreso me cuentes todos los detalles.

- Cuenta con eso - sonreí con falsedad. Sakura me abraso y nos despedimos.

Regrese con mi equipo para poder ir a entrenar, más que nunca necesitaba hacerlo.

Toda la tarde la pase con el equipo 15, al atardecer regrese a casa cansada y hambrienta. Aliste mis cosas para la misión y tome un baño mientras mi madre preparaba la cena.

Al amanecer salí de casa y me encontré con Kiba y Shino en la entrada de Konoha. Teníamos buen tiempo por lo que pudimos salir con calma.

Llegamos justo a la hora pactada al lugar donde nos reuniríamos con Sasuke. El sol ya se estaba ocultando y cada minuto que pasaba podía sentir una revoltura en mi estomago.

- ¿Que se cree Sasuke? ¡Ya debería estar aquí! - Dijo Kiba con furia y Akamaru ladro en señal de afirmación.

- ¡Cállate Kiba! - respondí alzando la voz.

- ¡No lo defiendas! - Se cruzo de brazos - Es obvio que aun sientes cosas por él.

- E-eso es co-cosa del pasado - me ruborice y voltee mi cara para que no lo pudieran notar.

- Hmp - Al escuchar eso mi corazón latió con fuerza y voltee para confirmar mi sospecha - De todos los excelentes ninjas de Konoha... ¿Enserio los mandaron a ustedes?

- Somos los mejores para las misiones de búsqueda - contesto Shino acomodándose los lentes.

- Si los iban a mandar a ustedes, mínimo debieron mandar a Hinata, su byakugan hubiese sido mas... - me miro de pies a cabeza - útil.

- Hinata esta en otra misión - contesto Kiba.

No se con exactitud lo que me hicieron sentir esas palabras. El nunca ah sido amable con nadie, ni con los de su equipo. 

Solo que imagine que después de la guerra había cambiado aunque fuera un poco. Me siento molesta por haberlo amado y me siento molesta porque mi mejor amiga aun lo ama.

- Les contaré lo que debemos hacer - Todos nos acercamos a Sasuke y saco un pergamino y lo extendió para que pudiéramos verlo - Nos encontramos en este punto, y debemos ir acá. Llegando nos dividiremos en equipo en 2 para que sea mucho mas rápida la búsqueda.

- ¿Qué es lo que estaremos buscando? - pregunto Shino.

- Una piedra. 

- ¿Todo por una piedra? - Dijo Kiba - ¿Para eso pides ayuda?

- No es cualquier piedra - Sasuke miro con furia a Kiba - De algún modo todo esta relacionado con los Ōtsutsuki. No les voy a decir nada más, su única misión es ayudarme a conseguir eso para que puedan regresar a Konoha lo mas rápido posible.

- ¿Como sabremos que piedra es? - pregunto Shino.

- Lo sabrán cuando la vean.

- ¿Cuando saldremos? - pregunte.

- Ya - Sasuke guardo el pergamino - Kiba y Shino irán juntos, Ino vendrá conmigo. 

- Prácticamente te quejaste de que me asignaran a esta misión y ahora quieres hacer equipo conmigo - reclame a Sasuke.

- Alguien debe encargarse de que no seas una carga.

- Yo puedo ir con ella - Dijo Kiba.

- Shino y tu ya están acostumbrados a hacer equipo, ademas, él es el que se encargara de ti - El azabache acomodo sus pertenencias y prosiguió - Si no hay mas reclamos, vayámonos.

- Si - dijimos los 3 y después partimos a toda velocidad.

Corrimos sin parar por aproximadamente media hora y al llegar a la cueva nos dividimos como nos dijo Sasuke.

- Si quieres podemos descansar un poco.

- Estoy bien - respondí.

Comenzamos a adentrarnos por uno de los túneles y encontramos miles de piedras brillantes. Me agache sin doblar las rodillas para poder recoger una de ellas.

- ¿Estas intentando coquetearme en plena misión?

- Claro que no - grite molesta y la cueva comenzó a templar cayendo piedras cerca de nosotros.

- Deberías controlar tu tono de voz.

- Deberías dejar de decir idioteces - volví a agacharme para seguir inspeccionando las piedras y así evitar tener que verlo.

- Probablemente no sea ninguna de estas.

- ¿Entonces? - Me pare a su lado y mire como si una sombra pasara sin embargo no sentí la presencia de nadie. Mi cuerpo tembló por el temor y me abrace del brazo de Sasuke.

- Ino, si alguien nos ataca no podre hacer mucho si te aferras de mi único brazo.

- Lo siento - me separé.

- Vallamos en esa dirección - Sasuke comenzó a caminar y yo lo seguí a paso lento. 

Su cercanía aún me pone nerviosa y los sentimientos que ya sentía seguros, me jugaban una broma pesada.










LA PROMESA 🌸 SAIINODonde viven las historias. Descúbrelo ahora