La cuestión del sol es que siempre está. Incluso en los días grises.
A pesar que no lo vemos directamente siempre se siente, e Incluso, siempre encuentra una forma, un hoyo entre las nubes para brindar sus rayos y su calidez.
La luna, bueno, un cielo nocturno azul es lindo, un cielo estrellado es hermoso, pero... ¿un cielo con luna? Un cielo con luna enamora, porque, cuando sólo hay estrellas siempre buscas entre todas la que parece más brillante o más grande, pero cuando la luna está en el cielo, siempre es lo primero que vemos.
Puede ser pequeña y a diferencia de las estrellas, necesita luz para brillar, pero es tan sencilla que te hace querer mirarla.
El resplandor de luna, ¿lo haz visto? Por la noche, su resplandor no siempre es el mas intenso, pero es lo suficientemente fuerte como para alumbrar un camino oscuro.
Y tú eres un resplandor de luna.
Tú, no eres Sol, y hay días en los que oscureces, a veces necesitas un sol para estar en crecientes, y aunque tu brillo no ciegue, y creas que éste no sea suficiente, nada me hace más feliz que tú pequeño resplandor en mi camino.
Andrea Solórzano
Tú eres suficiente, sólo
por ser tú.
Domingo, 22 de Abril del 2018
