17 black l.s

Capitulo 1

Louis se había levantado cerca de las 9 de la mañana para asear y limpiar su departamento, se pasaba solo de Lunes a Viernes ya que su mamá trabaja arduamente en una clínica para mantenerlo. Y aunque era mal visto que una omega trabajara tanto sin descanso a la mamá de Louis no le importaba, ella aria lo que fuera para mantener a su pequeño y dulce omega.

Louis no se dió cuenta del tiempo y cuando miró el reloj de la mesilla frente se dio cuenta que ya no le alcanzaba el tiempo para hacerse el almuerzo para luego marcharse al colegio. Decidió llamar al restaurante de la calle continua. Al llamar le contesto una voz profunda y grave la cual hizo que al omega le flaquearan las piernas, le costo un segundo recuperar la compostura. Después de indicarle al que a su parecer era un alfa de no más de 19 años lo que quería, colgó al escuchar que su pedido le sería llevado en 15 minutos.

Pasados los minutos sintió la puerta sonar, fue a abrir con el estomago sonando reclamando por comida. Se detuvo con la mano en la perilla al reconocer el olor de Calvin, su realmente jodido ex novio, el cual llevaba acosándolo hace poco mas de un año, desde que decido dejarlo porque y no soportaba sus abusos. Retrocedió dos pasos, alejándose de la puerta y de desagradable olor. El alfa al parecer igual logro olfatearlo, ya que al escuchar los pasos dudosos del pequeño omega, volvió a tocar aún más fuerte la puerta pero al no ver respuesta, hablo haciendo uso de la voz, ordenandole que le abriera. Louis luchando en contra de sus instintos se encaminó a paso lento para abrirle la puerta a ese pedazo de imbécil.

'¿Que haces aquí, Calvin?' dijo con altivez, disimulando su evidente nerviosismo, el alfa rio.

'También me alegra verte, bebé' dijo con ironía. Y Louis no podía estar mas rojo debido a la furia y asco que lo consumía.

'No me digas bebé, jodido pedazo de mierda' y al instante de terminar de pronunciar la oración, se arrepintió profundamente de haberla dicho. Vio como los ojos del alfa amenazaban con tornarse negros de la posible furia que había despertado la oración de Louis en el. Calvin se acerco amenazadoramente a Louis quien aun seguía en el marco de la puerta, con el semblante serio intentando disimular su creciente miedo. Cuando de la nada sintió un olor atrapante que hizo a su omega dar un salto debido a la intromisión tan agradable de su olor, busco con la mirada la fuente de tal maravilloso y reconfortante olor y lo encontró, encontró a una cabellera revuelta en rizos marrones con destellos cobrizos y unos penetrantes ojos esmeraldas. Louis hubiera caído al piso si no fuera porque estaba apoyado del marco de la puerta.

Calvin al sentir el fuerte olor a alfa puro no pudo evitar que sus ojos se abrieran con sorpresa. Se dio vuelta rápidamente encontrándose con un alfa un par de centímetros mas alto que el, con el ceño profundamente fruncido, sus labios rellenos estaban unidos en una linea recta haciendo que estos se volvieran pálidos debido a la presión ejercida. Vestía  un pantalón negro acentuado, una polera básica blanca con un colgante de cruz en el centro de su trabajado pecho.

Rápidamente recuperando la compostura y ocultando su asombro, hablo '¿Quién mierda eres tu?' hablo con evidente molestía con un intento de lanzar feromonas territoriales que se vieron opacadas por el perfume natural del gran alfa.

El gran alfa se tomo un segundo para mirar al alfa que intentaba inútilmente intimidarlo. El alfa sin siquiera mirarlo, espetó 'Soy Harry, y ahora ¿Que mierda haces tu cerca de mi omega?' haciendo énfasis para aclarar que era su omega, lanzando feromonas territoriales y posesivas que llegaron a impregnarse en los rincones mas recónditos del departamento del pequeño omega.

Louis no era tonto, se dio cuenta casi de inmediato que el prominente alfa había olfateado su temor e intentaba ayudarlo.

'¿T-tu omega?' Hablo Calvin, y dándose cuenta de su titubeo, volvió a hablar gruñendo 'No puede ser tu omega, no esta marcado.'

El ojiverde abrió la boca para responder pero no pudo ya que una suave y dulce voz lo interrumpió hablando por primera vez desde que se percato de su presencia.

'Me esta cortejando, aun no llegamos hasta ese punto' le guiño un ojo al ojiverde. 'Y si no te molesta, escoria de la vida, tenemos cosas que hacer, puedes irte al carajo' Dijo el ojiazul serio pero con una pizca de diversión en voz al ver la expresion de Calvin.

El alfa mas pequeño no podía estar mas rojo de la rabia al pensar que el alfa mayor pudiera marcar a Louis y el no. Tomo al pequeño omega por los hombros bruscamente, haciendo que el aludido soltara un gimoteo de dolor. El alfa de ojos esmeralda rápidamente empujo a Calvin haciendo que este soltara su agarre sobre su omega.

Calvin intento agarrar a Louis una vez mas, pero no pudo ya que Harry lo alzo hábilmente haciendo que el omega quedara abrazado a su tronco y pecho. Calvin paso de largo resfalandose y cayendo al piso. Harry ahora evidentemente furioso con el semblante serio y un par de esmeraldas amenazando con volverse negras, espeto 'Márchate. Ahora.' Calvin se incorporo y con llamas en los ojos se fue dejando al verde y el azul solos.

El omega no pudo soportar mas las lagrimas comenzando a brotar de unos cristalizados zafiros, se acurruco mas contra el pecho del alfa, mientras el los conducía a un sillón. Apenas Harry se acomodo bien, sentando a Louis en su regazo para que tenga mejor acceso a la base de cuello donde el le estaba lanzando feromonas tranquilizadoras. Louis apenas dejo de sollozar en el pecho de su alfa, levanto la vista encontrándose con el verde mas intenso y atrapante que había visto y seguro vería en su vida, sin poder evitarlo rompio a llorar de nuevo mientras escondia su cabeza en el cuello del ojiverde. Harry conmovido y con una necesidad inexplicable de calmar su llanto y dolor llevo su mano hacia la nuca de tembloroso omega dejando suaves caricias. Y justo en ese momento sintió confirmada sus sospechas desde que había esos hermosos ojos azules por primera vez, acompañado de un suave cosquilleo en la base de su cuello, supo que Louis también lo sintió porque subió su mano a la altura de la base de su cuello tocándose extrañado. Habia encontrado a su alma gemela, a su compañero de vida, con el cual compartiría su alma hasta el fin de sus días y mas, su lobo no podía estar mas contento.

Nadie sabe cuanto tiempo paso exactamente, se quedaron ahí hasta que los sollozos de Louis se detuvieron por completo dando paso a pequeños bostezos, que fue poco a poco contagiando a Harry. Ambos durmieron plácidamente, abrazados por el calor y olor de otro. Sintiendo por primera vez lo que era el amor, pero no cualquier amor sino un amor profundo, real y casto. un amor como los de los viejos libros de literatura. De esos amores en los que uno daría la vida sin pensarlo dos veces por el otro.