El doncel del amor y la cultivación

Extra: 4 "FengMain y Sanren. Promesa"

Jiang FengMain se encontraba corriendo entre árboles, bajo la luz de la luna llena, la cual alumbraba la oscura noche, rugidos y aullidos se oían por donde quiera, la energía del resentimiento hacia erizar sus bellos del cuerpo, con ojos abiertos a la par, agudizando su oído, su respiración se aceleraba cada vez más, su pecho ascendía y descendía con irregularidad, con su espada desenvainada en su mano derecha, gotas transparentes se deslizandose por su frente, atento a cualquier movimiento o sonido, era su primera cacería nocturna, se había separado de sus compañeros por cazar a un cadáver feroz por si solo; pero resulto que ese cadáver superaba su fuerza, por lo tanto solo le quedo huir sin rumbo alguno y perderse entre la oscuridad y los árboles.

El miedo se colaba entre sus huesos,i ntento pedir ayuda atreves de gritos de auxilio, pero llamaría la atención de bestias y monstruos, así que esa opción quedo descartada, la otra era esperar allí a que alguien lo encontrara, pero eso sería convertirse en una presa fácil esperando hacer devorada, así que está también la descartó, y la última era seguir avanzando sin rumbo alguno y esperar encontrarse con alguien conocido, lo malo es que también se podría encontrar incluso con su misma muerte, pero era las más lógica o con mayor esperanza de sobrevivir. Continuo hacia adelante, decidido a pelear por su vida si era necesario, lo único que quería era salir del Monte Dafan lo más pronto posible, las horas pasaban y su mala suerte continuaba, no se había encontrado con nadie de su secta o con alguien a quien pedir ayuda, solo unas cuantas bestias y almas de bajo nivel, sin embargo cuando huía de una de ellas se encontró con un cadáver feroz, sus largas uñas afiladas, sus dientes puntiagudos, su piel humedecida por la putrefacción, desprendía un olor que hacía que vomitara hasta la comida de hace una semana, en sus ojos ya no se notaban las pupilas, solo eran bolas blancas opacas, sus movimientos eran agiles y veloces, ¡Increíble para ser un muerto en descomposición!

Con movimientos agiles trataba de darle en los puntos débiles, pero fueron bloquedos o esquivados, con un rugido feroz libero energía de resentimiento con una fuerza sobrehumana, haciendo volar su espada a varios metros de allí.

La saliva caía sin parar, el olor de su boca era peor que la de su cuerpo, al punto de casi perder la consciencia.

A unos centímetros de distancia de su rostro podía percibir unas terribles y putrefactas encías, prominentes del cadáver, una flecha con un talismán se impregno en la cien del cadáver, el talismán se incendió en una luz azul, FengMain asombrado se levantó torpemente contemplado la escena, estaba feliz de estar vivo, a los segundos el talismán se consumió por completo en bravas llamas azules, el cadáver expulso su energía de resentimiento en un color negro opaco, el cuerpo cayo inerte contra el suelo en un sonido seco.

-¿Estas bien? – Pregunto un hermoso chico de cabello azabache, sujetado en una cola con una cinta roja, usaba una túnica negra con distintivos rojos, ajustada a su escultural cuerpo, de piel blanca y labios rosados, pestañas largas y ojos del mismo color de su cabello pero con un brillo especial, un joven con una apariencia exquisita a la vista. En sus manos sostenía un arco, en su cintura una espada enfundada, al otro lado una pequeña bolsa anaranjada y en su espalda un bolso para flechas.

- Sí, muchas gracias por salvarme. – Dijo con una sonrisa.

- De nada, es un gusto, debes tener cuidado, y más si vagas aquí solo bajo la luz de la luna. –Dijo con una amable sonrisa.

- Lo tomare en cuenta para la próxima, es que me perdí. ¿Te importaría guiar el camino de regreso por favor?

- Por supuesto, ¿Eres un discípulo de la Clan Jiang?

-Sí, soy Jiang FengMain, mucho gusto. – Extendiendo su mano hacia el joven.

-El gusto es mío, soy SanRen, y claro sígueme.

-Muchas gracias, te lo agradezco. - Dijo con una gran sonrisa.

- No tienes que, soy feliz ayudándote, normalmente casi siempre estoy solo, bueno siempre estoy solo, la gente de verdad no quieren a los donceles, nunca les dan una oportunidad.

-¡¿Eres un doncel?! – Pregunto asombrado el joven amo Jiang.

-Sí, y no me avergüenzo de ello, ¿Te molesta saber mi naturaleza?

-Para nada, simplemente me asombro. – Dijo con una amable y sincera sonrisa.

Caminaron durante varias horas, entre platicas y risas, pues ambos se sentían cómodos juntos, la confianza nació muy rápido. A las afueras del Monte Dafan ambos se despidieron prometiéndose verse de nuevo en la noche siguiente.

El doncel le regalo un collar a FengMain como un símbolo de su amistad, era un colgante sencillo, tenía una piedra de cristal de color negro con destellos púrpuras, el doncel también tenía uno idéntico puesto en su blanco cuello, el cual planeaba dárselo a un amigo.

Se despidieron con un fuerte y cálido abrazo, prometiendo verse allí de nuevo.

-Prométeme que cuidaras ese collar, es especial, eso simboliza nuestra amistad y confianza uno del otro. – Dijo SanRen sujetando sus manos con las de FengMain, mostrándole una bellísima sonrisa, este le contesto fuerte y claro.

- Lo prometo. – Sonriendo, su corazón latía con desesperación.

- Siempre estaremos juntos, al fin ya no estaré solo. – Dijo SanRen con una sonrisa.

- Siempre esteramos juntos. – Afirmó FengMain.

El líder de la Secta YumengJiang se despertó abruptamente con lágrimas escurriendo de sus mejillas, su almohada se encontraba húmeda y en su mano derecha sostenía con fuerza el collar que le había regalado el amor de su vida.

Las lágrimas salían con mayor fuerza, mientras susurro con voz entre cortada y débil "Siempre estaremos juntos". Un relámpago, seguido de un estruendoso trueno hizo temblar el cielo nocturno de Lotus Pier, significaba que una tormenta se avecinaba, al igual que los problemas.  

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elvis- Sempai