-¡Tocan a la puerta abuela!¡Es el cartero,trae una carta de mamá! -Grité. Habro la carta con el puño cerrado apoyado en mi corazon:
Querida hija:
A papá le ha salido un trabajo nuevo en Rusia y vas a tener que quedarte en casa de los abuelos estos últimos cuatros meses, mi vida se que té costará mucho adaptarte a un nuevo instituto, nuevos amigos... pero yo confio en ti cielo y sé que té adaptaras rapido, té llamare todos los dias.
besos, mamá.
Cierror los ojos, respiro lentamente cuatro veces, pienso gritar, pero... ¿de que sirve? no sirve de nada.
Primer día de instituto. 19 de septiembre.
Me dirijo a la parada del autobús, me subo y parpadeo dos veces, todo el mundo me mira, me intimidan. En el fondo está marcos, el chico mas popular del instituto, un chico rubio con los ojos azules, mirada penetrante, labios gorditos, y la pregunta de todas las adolescentes: '¿esta bueno?' pues la verdad es que si.
Me siento al lado suyo, las piernas me tiemblan como si estuviese a punto de morirme y me dice:
-'Hola, soy marcos'
-Yo so, so, soy be, betty. -Tartamudean do.
Comienza a contarme toda su historia, el motivo de por que estaba aquí... yo no me enteraba de nada, solo estaba pendiente de aquellos labios y ojos tan perfectos que miraba con una cara de panfila . El, todos los dias me contaba algo nuevo que habia sucedido en su vida, el error era que yo no me enteraba de nada, y tenía miedo a que algún día lo descubiera.
Hablábamos todos los dias por WhatsApp, ya que era lo más normal de cualquier adolescente, cada día me enganchaba mas, y mas, y más. Lo que no sabia era si le gustaba.