Higuel Drabbles

13

No hay nada como vivir tus "Primeras veces" al lado de tus amigos. De esta manera, el miedo es menor, tienes a quién aferrarte si las cosas salen malo alguien para celebrar si el plan es un éxito.

Hiro y Miguel se habían conocido siendo niños aún. No comprendían el mundo adulto... Pero había cosas en él que despertaban su curiosidad. El alcohol era un ejemplo.

No querían terminar ebrios. Nada de eso. Pero ambos llegaron a la conclusión de que querían probar el alcohol al menos una vez en la vida. Entones podrían formarse una opinión.

Así que se prometieron que, una vez que ambos cumplieran la mayoría de edad. Beberían juntos su primer tequila. Sería un acontecimiento importante. Incluso sellaron el pacto con saliva.

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Por fin, seis años después, llegó su momento.

Unos cuantos días antes, Miguel había cumplido dieciocho años. Ya podían beber alcohol legalmente. El suceso iba a ser toda una ceremonia.

Marco les ayudó a conseguir la botella y los caballitos. Los tres se reunirían en casa de Hiro, aprovechando una salida de Tía Cass. El Rivera mayor también iba a enseñarles cómo debía prepararse un buen trago de tequila.

Además, Marco también planeaba brindar con ellos. Un poco por cuidarlos, pero también por entrarle a la fiesta.

El Rivera mayor sirvió tres vasos. En un plato, colocó un poco de sal y limones partidos.

—¿Y bien, niños? ¿Jalan?

Parados alli, con el pecho y las barbillas en alto, los brazos en las caderas, los hombros atrás y la mirada fija en el otro parecían un par de gallos de pelea a punto de luchar a muerte.

(Y considerando que Miguel era por lo menos una cabeza más bajo que Hiro, la escena resultaba bastante graciosa. Marco se iba a destornillar de risa.)

—Jalo. —dijo Miguel.

—Yo también.

Ambos se miraron retadores unos segundos más. Los tres chicos tomaron su vaso y los chocaron. Acto seguido Miguel se llevó el suyo a los labios y dio un rápido trago. Hiro no se quedó atrás y copió sus acciones.

Marco sólo los observó con una sonrisa burlona y comenzó a contar en su mente.

Cinco.

Cuatro.

Tres.

Dos.

Uno.

Justo cómo Marco pensó, el potente sabor del tequila había sido demasiado para ellos. Terminaron por escupirse el licor mutuamente en al cara.  Él se carcajeó viendo las expresiones en sus rostros.

Miguel salió corriendo a la cocina para buscar refrescos o agua mientras Hiro buscaba un trapeador para limpiar el desastre que habían hecho.

—¡Por su juventud e inexperiencia! —dijo Marco.

Se bebió el contenido de su vaso tan fácilmente cómo si fuese agua. Y luego se fue a buscar a su hermano en la cocina.

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*Aparece de entre las sombras*

¡Hola! Lamento mucho el retraso :'D intentaré ponerme al corriente. Pronto. Por mientras, dejaré esto aquí.

Ya que queda con el tema del drabble, propongo un brindis (?) por que hoy el el cumpleaños de John Lennon  💚 okay no, pero si (?)

¡Gracias por leer!
Ciao!

*Se desvanece en la niebla*