Literalmente tengo un problema bien gordo. No tengo su número, ni se donde vive (según él vive cerca mío, lo que no sé es donde). Me tumbo en mi cama mirando al techo. No puedo estar hasta mañana sin móvil, si os digo la verdad no aguanto sin ver el instagram. Así que se me ocurre una idea, me levanto para buscar mi portátil, y me vuelvo a sentar en la cama.
Lo enciendo, y me conecto en instagram, miro las historias una a una, primero me encuentro una de Zac, con su novia la barbie, dándose un besito.
Al final poto en serio.
Sigo pasando las historias, y veo una de Nate, un compañero de clase. Están en el laboratorio, y de repente enfoca a un chico moreno, con unas gafas de plástico, imitando a lo que parece ser un científico loco, o algo así. Era Nick.
No puedo evitar reírme, es que es gracioso. Eso o es que me está empezando a gustar, y con cualquier cosa me hace reír. Mmmm... mejor olvidemos eso último.
En la historia, hay alguien mencionado. @therealnickrobinson
Me meto en el perfil, y sí, es él. El corazón empieza a ir demasiado deprisa. Creo que me voy a desmayar.
Alguien llama a mi puerta, eso hace que me asuste, y como reacción cojo el primer cojín que encuentro en mi cama para taparme mi pijama súper infantil. También cierro el portátil lo más rápido que puedo.
-¿Quién es?- pregunto un poco sobresaltada.
Nadie responde, y la puerta se abre. Es Hardin. Sus ojos color esmeralda me miran, mientras que se pone su pelo castaño detrás de la oreja. Se acerca hacia mi, y se sienta a mi lado en la cama.
-Jessica...- me dice con una voz temblorosa.
-Jess- le corrijo. Que manía tiene la gente en serio.
-Jess... tengo algo que decirte- me dice agachando la cabeza. Sin poderme mirar a la cara. Yo le busco la mirada pero me evita. Algo gordo tiene que ser, porque él no es nada vergonzoso. Es la primera vez que le veo así. Así que le dejo continuar.
-Llevo muchos años queriendo decirte esto, Jess. Lo he evitado lo máximo que he podido, pero es que no puedo aguantar con esto. No puedo callarme más- para para coger aire. Realmente tengo miedo por lo que me puede decir.
-Te he visto crecer, he visto como cada año eras más preciosa que el anterior. Se que yo antes te gustaba, que te sonrojabas cuando te miraba, y no parabas de sonreír por cada cosa que te decía, pero claro eras más pequeña- me dice.
-Eso era antes, yo ya no me sonrojo- dijo con una sonrisita, y poniéndose mis mejillas rojas sin querer.
Él no puede evitar sonreírme.
-No has cambiado nada- me dice mientras acaricia mi mejilla sonrojada.
-Continúa- le digo.
Aparta la mano para volver a ponerse el pelo detrás de la oreja. Aunque me gusta mucho más cuando lo tiene para adelante.
-Tus ojos marrones y tu mirada, me volvían loco Jess, y lo siguen haciendo. Tú me vuelves loco. Llevo años intentado apartarte de mis pensamientos, pero es que no puedo. Por mucho que te busque en otras chicas, por mucho que beba, nada puede hacer olvidarte. Soy un idiota por gustarme la hermana pequeña de mi mejor amigo-
Le interrumpo para decirle algo, pero no me llega a salir nada.
-Déjame terminar- me dice. -En realidad, no quiero que me respondas nada. Se que no podemos ser nada, porque tu hermano me cortaría los huevos. Pero... por un beso no creo que pase nada...- dice mientras que se acerca a mi y poniendo una mano en mi pierna. -¿Me dejas?- pregunta.
Yo indecisamente, sin saber que hacer, asiento sin querer. Hardin sonríe satisfecho y se acerca hacia mis labios. Antes de hacerlo, me mira a los ojos fijamente y como tarda mucho en besarme, lo hago yo.
Siento sus labios cálidos y suaves. Hace unos años hubiese pagado por hacer lo que estaba haciendo ahora mismo. No puedo creer que me esté besando con el amor de mi infancia. Pero... ya no hay mariposas, no se me acelera el corazón, ya no hay nada. Algo me falta, ya no siento lo mismo que antes.
Instintivamente, me separo. Y justo se abre la puerta.
-Os dije que al final caería- dice Patrick, asomarse por la puerta. También se escucha reírse a mi hermano.
Soy estúpida, ¿Cómo no podía haber caído en que Hardin es idiota? Igual que mi hermano y Patrick. No puedo reaccionar, creo que estoy incluso pálida, realmente me ha dolido. Sabiendo todas las idioteces que han hecho, no me esperaba que esto me lo fueran a hacer a mi.
En silencio me levanto, y me dirijo hacia el baño. Ellos no dicen nada, por lo menos han dejado de reírse. En cuanto llego al baño, cierro la puerta con el pestillo. Me siento en el wáter y empiezo a llorar. No sé por que me afecta tanto, si a mi no me gusta Hardin, sino Nick. Digo... nadie. Pero aunque no me guste, eso es jugar con los sentimientos de una persona, y más yo, que soy muy sensible.
A los minutos llaman a la puerta. Yo no respondo.
-Jess, lo sentimos mucho, de verdad, pensábamos que te lo tomaríais como una broma- escucho decir a mi hermano.
Yo sigo sin decir nada.
-Lo siento, hermanita- vuelve a decir, al no tener respuesta. Escucho como se marcha.
Me levanto para lavarme la cara en el lavabo. Y me quedo mirando mi reflejo. Estoy horrible, todo el maquillaje corrido y los ojos rojos de llorar. Sin pensármelo dos veces, me echo el agua a la cara.
Vuelven a llamar a la puerta, no creo que vuelva a ser mi hermano.
-Jess, soy yo- es Hardin.
-Vete- le contesto bruscamente.
-Por favor déjame pasar, tengo que explicártelo-
Me lo pienso muy bien, y al final decido abrirle. Quiero escuchar las tonterías que me va a decir.
Quito el pestillo, para que sea él, el que abra la puerta. Y esta vez me siento en el suelo, apoyándome en la pared.
La puerta se abre lentamente, y al verme sentada en el suelo, le escucho resoplar. Se sienta a mi lado y me intenta poner el brazo por encima, pero yo le rechazo.
-Jessi, lo siento- dice susurrando.
Solo él me llama Jessi. Eso hace que se ablande un poco el corazón.
-Sé que soy tonto, no debería haberlo hecho, espero que me perdones- dice lentamente. -Sabes que eres como mi hermana pequeña, que siempre te voy a querer. Encima eres una chica preciosa, lista, graciosa... más me gustaría a mi estar contigo. Pero es que te mereces a un chico mejor que yo, Jessi. Sabes que te quiero un montón. Así que ven aquí, pequeña. Y dame un abrazo- me dice mientras que estira los brazos para que le abrace. Y yo sin poder evitarlo, cedo. En el fondo tiene buen corazón.
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HOLAAAA, ya se que ha pasado mucho tiempo desde el último capítulo. Pero me hacía ilusión seguir escribiendo. Espero que os guste ❤️
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Prohibido. {NICK ROBINSON}
RomansaEl sentido de la vida es asimilar que es un sinsentido, por eso existe el amor... para demostrarnos que el sentido de la vida no es lo más importante, lo importante es lo que sentimos...