Eyeless Jack x Jane The Killer : Amor Homicida

Entretenido

Pasaron unos días. Eyeles Jack quería hacer algo con Jane. Caminó hasta su habitación al final del pasillo.

—¿Quién es y qué quieres?— La oyó chasquear desde detrás de la puerta cerrada. Jack frunció el ceño.

—¡Jane, soy yo!— Respondió con cautela. Ella era peligrosa cuando estaba en estos estados de ánimo.

—¡O-oh Jack! ¡Espera, ya voy!— dijo rápidamente. Jack escuchó el sonido de una ventana que se cerraba y los pasos que corrían hacia la puerta. Dio un paso hacia atrás cuando ella abrió la puerta y saltó hacia él. Envolvió sus brazos alrededor de su cuerpo mientras se tambaleaba por el impacto.

—¡Wow, jaja! Hola,— dijo riendo. Jane se rió y hundió la cara en su pecho. Jack la sostuvo con los brazos extendidos:

—Oye, tuve una idea,— dijo alegremente, contento de que ella hubiera superado su estado de ánimo. Jane le sonrió, lindos y pequeños hoyuelos formándose en sus enrojecidas mejillas. A Jack le encantaba cuando sonreía así.

—¿Cuál es tu brillante idea?— Bromeó. Jack sonrió, mostrando sus dientes afilados:

—Estaba pensando que podríamos ir a entrenar un poco juntos y luego ir a cazar un poco...

Jane chilló y agarró a Jack por los hombros, saltando arriba y abajo mientras sonreía:

—¿De verdad Jack?¿ De verdad? ¡Dios, no he ido a cazar desde meses!

Jack se rió de su excitación y entusiasmo, y la tomó de la mano, yéndose por las escaleras sin decir una palabra. Cuando salían por la entrada enorme de doble puerta, Jack se estrelló contra Liu, que estaba caminando, casi sin aliento. Jack agarró el brazo de Liu para evitar que volara hacia atrás:

—¡Mierda, lo siento, tío!— Se disculpó, estabilizando a Liu. Liu rápidamente recuperó el equilibrio, y medio sonrió a Jack, sin mirarlo a los ojos:

—Oh, ehm, está bien, ¡simplemente no estaba mirando a dónde iba!— Liu se rió tímidamente y siguió caminando hacia la casa, con el rostro enrojecido. Los "ojos" de Jack se arrugaron cuando vio a Liu irse.

—Eso fue raro,— le dijo a Jane,— me pregunto de dónde venía. 

Jane lo miró rápidamente:

—Tal vez él estaba cazando, o haciendo un recado para Slenderman, o ... No lo sé. ¡Vamos a entrenar para que podamos ir a cazar!

Jack sonrió de nuevo, sin darse cuenta del extraño tono en su hermosa voz, y le tomó la mano mientras él la guiaba.

Cuando llegaron al claro de entrenamiento, metidos un poco en el bosque, Jane fue directo a los cuchillos y blancos, mientras Jack agarraba a un gran muñeco de práctica. El maniquí estaba hecho de madera, y estaba desgastado y rayado, y lleno de abolladuras y agujeros del anterior uso. Arrastró la cosa pesada hasta el centro del claro, esquivando los cuchillos voladores que Jane estaba tirando a los blancos. No se perdió una sola, dándoles a todos los objetivos directamente en la diana desde más de 10 metros de distancia. Jack se maravilló de su precisión y volvió a su propia práctica. Caminó hacia atrás alejándose del objetivo, hasta que estuvo a unos 5 metros de distancia. Sacando todos los pensamientos de su mente, cerró los "ojos" y sintió el peso del escalpelo en su mano mientras lo sacaba de su bolsillo con capucha. Abrió los ojos y saltó sobre el maniquí, cortando con el bisturí la garganta y dándole un puñetazo tan fuerte que sintió la madera crujir bajo su puño. Siguió golpeando la madera hasta quedarse sin aliento. Se puso de pie, girándose para encontrar a Jane mirándole, con sus labios oscuros formando una O. Ella caminó silenciosamente hacia él, tomando suavemente su mano ahora palpitante entre las suyas. Sacó un vendaje blanco del bolsillo de su vestido y comenzó a envolverlo alrededor de su nudillo. Jack ni siquiera había notado que se había arrancado toda la piel, dejando la parte superior de sus nudillos brillando de un rojo. Jane terminó de envolver el vendaje y se llevó la mano de este a sus labios, besando suavemente su herida. "Muy sexy", pensó para sí mismo. Él le sonrió maliciosamente a Jane, antes de tomar su rostro entre sus manos y tirar de ella hacia él. Cuando sus labios se encontraron, Jack sintió que Jane se ponía rígida debajo de él, y luego se relajaba mientras profundizaba el beso. Él tiró de su labio inferior con sus dientes, lo que la hizo reír, y enredó sus manos en su enmarañado cabello. En respuesta, Jack agarró a Jane con más fuerza, sintiendo su cuerpo bajo sus manos, y luchó su lengua contra la de ella. Finalmente, se separaron para tomar aire. Jane sonrió, frunciendo el ceño a Jack. Él le guiñó un ojo: