CLEXA - ARQUITECTA VS ING. CIVIL

La Arquitecta conoce a la Ing. Civil

Woah. Es ella.

Oh Dios mío.

Clarke casi podía escuchar los pensamientos de sus compañeros arquitectos cuando las puertas del ascensor se abrieron, revelando a la mujer que había sido el tema principal de su conversación hace solo un momento.

Dentro del ascensor, mirándolos fijamente, la chica mantenía su dedo sobre el botón cuando Clarke y sus compañeros de oficina entran al ascensor. Como de costumbre, Clarke fue empujada hasta la parte trasera del ascensor siendo aplastada por los demás, pero al ser una de las persona más pequeñas allí, aún podía ver a la mujer a través de los espacios entre tanto cuerpo. Una chaqueta descolorida color verde y arrugada, colgando de los hombros de la mujer, dejaba en evidencia un día largo en el trabajo. Clarke fijo sus ojos sobre los hombros de la mujer admirando su diseño. Entonces, procedió a bajar su atención por la espalda hasta su trasero. Vestida con unos jeans boyfriend, demostraba ser completamente suficiente para llenar el espacio que su creador había previsto. Mmm, mmm. Y los zapatos de tobillo-alto color miel con lodo acumulado alrededor de ellos. Marca Vixen, muy familiar para Clarke. Todos llevan zapatos hechos por la compañía.

El silencio en el ascensor era divertido Clarke. Y pensar que solo hace unos minutos, Lincon había estado narrando cómo iba a pedirle una cita a la mujer y los demás chicos se burlaron de su palabrerío. Clarke solo cruzo sus brazos y tomo asiento de nuevo para disfrutar de las burlas, e incluso lanzo algunas de su propio repertorio: "Lincon, ¿Al menos sabes su nombre?"

Cuando Lincon se sonrojo, otra mujer del grupo, Luna, le dijo a Clarke, "Una vez tú la viste cepillándose los dientes, ¿recuerdas?" Clarke hizo un gesto en afirmación. "Y yo te dije que la había visto con una chaqueta que decía 'Ingeniero Civil' en la espalda."

"Sí, nuestros enemigos declarados, los Ingenieros Civiles," Clarke añadió con una sonrisa.

"La chica debe ser de las oficinas de la planta alta si es ingeniero civil," dijo otro chico, haciendo recordar al grupo, todas las veces que la vieron por esa zona.

No es que Clarke culpara a los hombres, de no poder evitar ir detrás de la joven mujer. Ella resulto bonita. Más que bonito. Esa mujer tenía el tipo de sonrisa que puede derretir el invierno a primavera y a pesar de que su rostro se veía un poco pálido y agotado al final del día, su dulce belleza aun deslumbra. El hecho de que el porcentaje de mujeres en esa línea de trabajo fuera tan bajo en la planta baja, significa que los hombres prácticamente babean por cualquier mujer que entrara, y no era la excepción con una tan hermosa como aquella mujer.

El ascensor timbró al llegar a la planta baja y todos salieron de al abrirse las puertas, incluido Lincon con la cara roja. Clarke se despidió de sus colegas arquitectos con una sonrisa de complicidad y se dirige a su coche. Amaba su coche. Una recompensa comprado para ella, por ella misma. Un sueño hecho realidad. El Mercedes SLK. Con líneas elegantes en plata y rojo en su exterior, asientos de cuero y rojo plata con detalles en negros, porque cierta persona había insistido en rojo. Se metió al coche, puso en marcha el motor, lo calentó y abandono el estacionamiento.

El tráfico fue amable con ella, así que llego a casa unos minutos antes de lo habitual. Se quitó la chaqueta azul, se lanzó al sofá, y apoyó sus piernas sobre la mesa de café, arrojando la llave del coche en la mesa al mismo tiempo. Dos dedos apretaron el mando a distancia y tenía una balada suave saliendo del sistema de sonido que había instalado hace apenas unos meses. Esa era la mejor decisión que había tomado. No, espera. Claro que no. La segunda mejor, pensó para sí misma, sonriendo mientras sus ojos se cerraban para disfrutar de la música.