Pasaron dos meses desde la excursión que hicieron los cuatro amigos. Por parte de Bambam, este le había dicho a Myeong de irse con él a Tailandia, pero la chica ya tenía planes con su familia y no quería dejarlos botados después de pasar cerca de dos años sin verse.
Hoy era 10 de febrero y Bambam estaba como loco pensando que hacer para sorprender a Myeong el día de San Valentín.
En verdad Bambam pensaba que podría llevarla a cenar y todo eso, pero él quería ser creativo y sorprender a Myeong así que todas las ideas típicas estaban descartadas.
«¿Qué puedo hacer?», pensaba constantemente el chico mientras daba vueltas por su apartamento.
De pronto se paró y pensó que quizá para ir teniendo algo preparado debería hacerle un regalo.
-Vale, ahora no tengo una cosa que pensar si no dos... -dijo Bambam para el mismo.
Rápidamente se le pasó una idea por la cabeza.
-Podría llamar a Yugyeom y que me de ideas -dijo para él mientras desbloqueaba su móvil.
Primer pitido.
Segundo pitido.
-¿Si? -contestó a través del móvil.
-Hoolaa.
-Hola, ¿Qué tal estás? -preguntó.
-Bien, pero verás... -Hizo una pausa y continuó hablando-: Necesito ayuda para lo del día 14.
-Aaah, ¿Y qué pasa? ¿No sabes qué hacerle a Myeong? -preguntó.
-Exacto, ¿Tú que tienes pensado?
-Pasar el día juntos -respondió de forma simple.
-¿Sólo? -Bambam quedó dudoso.
-A ver... es depende también -dijo Yugyeom.
-¿Depende de qué?
-De la chica, osea Hee Sook no es exigente con las fechas, dice que prefiere que haga algo que yo realmente quiera a algo por quedar bien y demás así que ese día lo quiero pasar con ella sin más rollos. -Hizo una pausa y añadió-: ¿Tú realmente qué quieres hacer?
Bambam quedó en silencio unos segundos ya que estaba reflexionando.
-Pasar el día con ella, llevarla a dar un paseo tranquilo, sin prisas... Un lugar donde no haya mucha gente para que tengamos algo de intimidad...
-¡Ves! ¡Ya tienes una idea!
-Eso parece. -Bambam sonrió ya que al parecer ya había encontrado algo que hacer el 14.
-No creo que Myeong sea exigente, seguro que se lo pasará bien hagas lo que hagas.
-Vale gracias.
-De nada, para cualquier cosa consúltame.
-Okaay, hasta luego. -Bambam colgó.
•
Pasaron los días hasta que llegó 14 de febrero. Bambam no había organizado nada, simplemente se dejaría llevar y disfrutaría del tiempo junto a su novia.
Ahora era por la tarde y el chico se encontraba en frente de la puerta del piso de Myeong la cual no sabía nada de la cita.
Bambam tocó la puerta.
En poco tiempo la chica la abrió y se encontró con el chico de frente.
-Hola -dijo el chico con una gran sonrisa en el rostro mientras mostraba un sobre de papel.
La chica abrió los ojos como platos debido a que se sorprendió.
-¿Qué es eso? -preguntó curiosa.
-El suficiente dinero para que pagues un año el Viki Pass -dijo orgulloso.
La chica se quedó en shook. No sé podía creer eso, osea un año sin anuncios, en HD y demás en Viki.
-¡AAAH BAMBAM TE AMO! -Myeong se despertó del shook y se botó a los brazos del chico.
-Sé que me quieres, yo también te quiero -dijo mientras aceptaba el abrazo de la chica.
-Gracias Bambam. -La chica sonrió y le dio un pico.
-Nada. -Le dio una leve caricia en el pelo.
Luego la pareja salió del bloque de pisos.
-¿A dónde vamos a ir? -preguntó Myeong con emoción.
Bambam le agarró de los hombros a la chica.
-Verás, no tengo nada planeado, sólo quiero pasar tiempo contigo —dijo con sinceridad.
Myeong se puso la mano en el pecho.
-kzlslanjsixia. -Empezó a decir cosas sin sentido.
-¿Estás bien? -preguntó el chico.
-Sí, sólo que...
-¿Sólo qué...?
-Eres muy lindo -comentó con sinceridad.
Bambam ante eso se sonrojó y se puso nervioso ya que no se lo esperaba.
•
Finalmente la pareja paseó por las calles durante unas horas descansando de vez en cuando. En este día lo pasaron genial, sintieron que se habían unido un poco más, quizá por el día que era hoy.
ESTÁS LEYENDO
Videoclub; kunpimook bhuwakul
FanfictionEsta historia trata sobre Myeong, una chica tranquila y de aspecto indiferente. Ella no esperaba para nada que unos de sus clientes más habituales fuera a ser algo más que eso, pero quien sabe, la vida es imprevisible.