、、、《¿piensa, acaso, en el príncipe de golconda o de china, o en el que ha detenido su carroza argentina para ver de sus ojos la dulzura de luz? ¿o en el rey de las islas de las rosas fragantes, o en el que es soberano de los claros diamantes, o en el dueño orgulloso de las perlas de ormuz?》、、、
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claro que renjun tenía más amigos. yukhei-ge, kun-ge y lele. pero todos estaban en china.
solía pensar en ellos a menudo.
cuando nana salía y lo dejaba de lado por jeno. cuando nana hacía proyectos. cuando nana hacía deporte. cuando cualquier cosa era más importante para nana que él. a veces en la soledad de su habitación rosita, con olor a vainilla, sólo pensaba en el peli rosa.
pero sólo eran amigos ¿no?
los amigos no sienten eso, y renjun estaba más que consciente de eso.
volteando a ver la lluvia cayendo, como sus lágrimas se preguntó. ¿porqué lucas y kun tenían una relación? hasta el, ya no tan, pequeño chenle tenía una pequeña relación con un tal yangyang, el cual conoció a su bebé lele cuando él llegó a corea.
<<eso está mal y punto final.>>
pensó y frunció su ceño. sorbió su nariz y vió el té aún un poco humeante que su madre había llevado a su habitación algunos instantes antes.
su madre sabía que algo pasaba, pero muy raras veces tenía tiempo de ir a decir sólo una línea a su hijo.
por eso desde que renjun se dio cuenta de que todo esto ocurriría dentro de él, en su habitación a solas, solía hacerse bolita y llorar.
descargar lo que le desgarraba y curar sus desgracias.
olvidar, viendo los moomin. sintiendo, viendo las flores. y amándolo, oliendo las rosas azules que le gustaban a él.
renjun secó, finalmente, toda su carita, sus manos se dirigieron al té de manzanilla y lo tomó entre ellas, alzando la taza y tomando de ella.
volvió a un año y medio atrás. cuando no sabía coreano. cuando su dientito espantaba a los demás. cuando se había sentido más pequeño que nunca.
suspiró como chica enamorada -que casi lo era- y sonrió como bobo.
<<hey, soy na jaemin, ¿y tú eres?>>
en ese momento el chino no sabía que hacer, sólo entendió el verbo "ser" de la oración, por lo que miró al nativo confundido.
<<na-na, repítelo conmigo, na-na jaemin>>
A partir de ese día, en las clases, jaemin era su compañero de banco, para enseñarle. en las tardes, jaemin iba a casa del peli avellana para enseñarle coreano. hasta que finalmente aprendió.
así se hicieron mejores amigos. y había veces, como en las que renjun miraba los ojos de nana caía más ante él.
pero nadie podía escuchar sus suspiros, sus padres estaban ocupados, sus amigos estaban en china; y en ese instante el amor de su vida estaba teniendo una cita bajo la lluvia.
terminó su té sin saberlo. miró a la televisión y ya no estaban los moomin allí. miró a la ventana y las nubes seguían grises, pero la lluvia había cesado.
el lirio que descansaba en la mesita de noche color chocolate, ya se estaba marchitando.
tal vez era una señal para que sus sentimientos hicieran lo mismo.
