、、、《¡pobrecita princesa de los ojos azules! está presa en sus oros, está presa en sus tules, en la jaula de mármol del palacio real; el palacio soberbio que vigilan los guardas, que custodian cien negros con sus cien alabardas, un lebrel que no duerme y un dragón colosal.》、、、
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sí, ¡renjun, ya tenía otros dos amigos! desde que se había distanciado de nana por jeno.
mark y donghyuck eran todo lo contrario a él, así que se podía decir que se complementaban 'bien'.
esa noche, renjun haría algo que nunca, ni siquiera lo había pensado. escaparía de casa con sus amigos, y estaba emocionado.
estaba harto de estar en casa, de sólo tener a nana y ser desplazado, de ser un niño bueno.
así que cuando todos se fueron a dormir, renjunnie bajó por la ventana de su habitación, con mucho cuidado de no despertar a irene y las demás que trabajaban en la casa.
los guardias que había fuera de casa, se encontraban en una especie de limbo, no estaban ni dormidos, ni despiertos.
así que cuando mark le envió un mensaje, donde decía que ya estaban fuera, esperándolo, renjun no dudó ni un segundo para saltar los barrotes de su casa. con el más mínimo cuidado de que yuta y taeyong -los guardias- no lo descubrieran.
al subirse al carro comenzó una charla amena entre los tres.
—"entonces, ¿nunca te has escapado?"— sonrió donghyuck y el chino negó.
—"pero estoy dispuesto a no ser el niño bueno de mamá y papá más. quiero cambiar"— mark y donghyuck compartieron una mirada cómplice. —"díganme, ¿qué hacen cuando salen?"
—"oh, jun, esta es una ciudad que nunca descansa"— mark habló esta vez, dando una vuelta en una avenida abarrotada de alcohol.
—"esperen, ¿vamos a beber?"
—"no, injunie, nosotros no hacemos esas cosas, aún no, pero salimos a apostar"— explicó el pelirrojo, sentado del lado del copiloto.
renjun, finalmente se sentía libre, hasta que su celular sonó.
—"chicos, bajen la música"— los acompañantes, nerviosos de que el hijo del embajador de china fuera descubierto, hicieron caso a la orden de éste.
—"¿renren?"— renjun se desconcertó, ¿qué hacía él hablándole a esa hora?
—"¿qué quieres, jaemin?"— contestó de manera poco usual, mark y donghyuck se asustaron, no creían que el chino fuera capaz de contestar de manera cortante.
un sollozo se escucho por el celular, mark se estacionó y los dos coreanos volteaban a ver expectantes a renjun el cual sólo rodaba los ojos.
—"estoy ocupado, hablamos luego"— colgó.
nana estaba triste y renren lo abandonó. aunque nana lo había abandonado primero, pero no lo sabía.
