—Harley.—Lex Luthor entra a la habitación y Harley reacciona escondiendo el eco.—Vámonos, tenemos que ir antes de que el imbecil venga por ti.
—¿Que? ¡Yo no me quiero ir a otra parte! ¡Yo quiero regresar a Gotham!
—¡No! Entiéndelo, nos tenemos que ir. La gente de tu amante y sus secuaces están en Los Ángeles, así que vámonos.
—¡No pienso ir contigo a ninguna parte!—Harley dice entre dientes.
—¡Si lo harás!—Lex Luthor toma a Harley del cuello y se sube arriba de ella en la cama.—¡Lo vas a hacer! ¿O acaso quieres que algo malo le pase a nuestro hijo?
Harley se sorprende al escucharlo decir eso, sabía de su hijo.
—Si, se que estás embarazada.—Le sonríe.—Me alegra que vayamos a tener un hijo, es la mejor noticia que podría recibir ahora.
Harley estaba en shock viendo como perdido la cabeza totalmente, estaba completamente loco y ahora no lo dudaba.
—Lex...sabes perfectamente que mi hijo no es tuyo.—Susurra.—¿Que te está pasando?
—¿Como que no es mío?—Ríe.—Oh mi vida, que gran chiste. Por supuesto que es mi hijo, es nuestro y te juro que lo haré feliz. Ahora vámonos, por que ya tengo a tu familia junto a Ivy vigilados por si intentas algo, no dudaré en matarlos. Ahora...nos iremos a otra parte a vivir felizmente junto a nuestro hijo. Y más te vale que el sepa que yo soy su padre...—Se levanta de encima de ella.—Nos vamos en 5.
Lex camina hacia la puerta y sale de la habitación.
Harley empieza a llorar fuertemente, ahora todo estaba perdido. Le haría daño a su familia si ella se escapará, el padre de su hijo era el Joker y de eso no había duda alguna. Todo se estaba volviendo una pesadilla, pero ella debía seguir adelante por ella y por su hijo. Y por volver a encontrarse con el Joker pronto.
7 meses más tarde.
El Joker estaba acostado mirando hacia el techo, siete meses...siete malditos meses habían pasado desde la última vez que la vio. No sabía dónde diablos estaba, cada pista que tenía, cada lugar a donde iba, era cada parte de donde Lex Luthor lograba escapar junto a su mujer.
Muchas veces se preguntaba ¿Como estaba? ¿Le habían hecho daño? ¿Como se sentirá? No tenía nada de información sobre ella, sus hombres en los intentos de recuperarla la habían visto distinta pero ahora solo corría hacia a Lex.
La habían cambiado, de eso estaba seguro. Pero aún así, el no se rendiría encontrarla lo mucho antes posible. Era lo único que le importaba, y Lex iba a lamentar lo que hizo.
—Jefe.—La voz de un matón interrumpe sus pensamientos. Escucha como toca la puerta.
—¿Que?—Responde hablando fuerte.
—Tenemos nueva información sobre Harley, Italia es nuestro siguiente punto.
—Está bien.—El suspira y se levanta de la cama.—Lo intentaré una y otra vez.
[...]
Harley caminaba por el jardín de la gran casa de Lex Luthor, ahora estaban en una nueva en Italia. Su vientre estaba enorme, tenía siete meses de embarazo, ya le quedaba poco tiempo para dar a luz y eso la hacía emocionarse por su hijo.
Usaba un vestido amarillo un poco corto, este se levantaba gracias a su hijo.
Ella acaricia su vientre suavemente mientras veía como el verano se exponía sobre el gran jardín.
Extrañaba al Joker como lo tenía idea, muchas veces intento comunicarse con él para avisarle sobre su hijo. Pero era inútil, no se podía comunicar con el por tanto que quisiera.
—Harley.—Lex camina hacia a ella y le da un beso en los labios, el cual Harley no correspondió.—Saldré un par de días de la ciudad, pero tú te quedarás aquí disfrutando de Italia. ¿Como te has sentido? ¿Cómo está mi hijo?
—Estamos bien.—Harley dice seria.—Es mejor de que te vayas a trabajar de una vez.
—Si, eso haré. Bueno regresaré en unos días, los amo demasiado.—Le vuelve a dar otro beso y se agacha para darle un beso en el vientre.—Adiós.—Harley solo asiente.
A lo lejos unas camionetas negras vigilaban la casa, en una estaba el Joker. Ahora más que nada estaba listo para atacar la cada.
Puede ver a Harley, su corazón se paralizó al verla, seguía igual de hermosa como siempre. El sonríe, tanto tiempo sin ver a su Arlequín.
Su sonrisa desaparece al ver el cuerpo de Harley. No, no podía ser posible. Ella estaba embarazada.
El Joker deja de mirarla y golpea su cabeza contra la ventana de la camioneta.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
La embarazó, el maldito la embarazó.
—¿Está bien Jefe?—Pregunta Rocco.
—Salgamos a matar a ese cabron ahora mismo.—El dice entre dientes.
Lex Luthor estaba afuera de su casa esperando su vehículo, el hablaba con algunos de sus matones mientras lo esperaba.
Unos balazos lo asustaron llamado su atención. De pronto, frente a el puede ver al mismísimo Joker.
—¡Lex Luthor! ¡Que gusto da verte!—El dispara hacia las piernas de Lex.
Lex Luthor cae al suelo gritando. Los demás matones de J acaban con los que estaban con el.
—¿Creías que no me volverías a ver en tu vida?—El Joker ríe.—Vengo por lo que es mío.
—Hijo de puta, no puedo...no puedo sentir las piernas.
—Eso te pasa por imbecil...—El Joker suspira.—Vigilen, no dejen que este payaso escape. Yo iré a dentro de la casa a arreglar unos asuntos.
