#Fictober2018

Día 10: Cafetería

Personajes: Diamond Ringsley & Abigail (+ Zoe Min mencionada) (OC's)

-Ey Diamond, ¡Diamond!

-Ah... ¡Ah!

La chica de cabello lila se despertó sobresaltada de sus pensamientos para volver a la realidad: con Abigail, en la cafetería de la universidad.

- Oye ¿estás bien? Te veo muy... distanciada últimamente. - le preguntó su amiga, con una expresión preocupada.

-No, no es nada. Es sólo que... no he dormido bien. - Contestó Diamond, con una sonrisa para tranquilizarla.

Sin embargo, eso no era cierto del todo. La verdad era que últimamente no podía dejar de pensar en Zoe, la chica que conoció hacía apenas unas semanas. Se conocían tan poco, pero a la vez le había cogido tanto cariño... Pero a Diamond le daba mucha vergüenza encontrársela en la calle, se ponía roja como un tomate y le daba un vuelco al corazón... Tenía que esconderse rápidamente porque no quería que Zoe la viese de esa manera.

Es que le parecía tan hermosa... Pero, a la vez se sentía extraña por tener esos pensamientos. Nunca se había percatado tan detalladamente de lo hermosa que era... una chica... estaba pasando por un proceso de descubrimiento de su bisexualidad, y quizás le daba demasiadas vueltas al tema, porque Abby siempre la pillaba distraída o medio dormida.

-Oye, ¿otra vez? ¡Tierra llamando a Diamond!

Diamond volvió en sí (otra vez) y se quedó mirando fijamente a Zoe.

-Oye... no te creo. ¿De verdad es sólo que no has dormido bien? Porque entonces llevas sin dormir como tres semanas. Si tienes algún problema, puedes decírmelo. Eres mi amiga, al fin y al cabo, y haré todo lo posible para ayudarte.

-E-es que... m-me gusta alguien... - dijo, en un tono bajo.

Le daba un poco de miedo decirle a su amiga que estaba enamorada de una mujer. Quizás no se lo iba a tomar bien... Al menos su padre no lo haría.

-¿Eh? ¿Que te gusta qué?

-¡No! ¡Que me gusta alguien!

-¡¡¡OOOOOOH!!! ¿¡TE GUSTA ALGUIEN!? ¡Por fin, llevas como un año sin crush! Dime, ¿quién es el afortunado?- Abigail se mostraba emocionada de repente, le encantaba hablar de ese tipo de temas.

-Ehm... bueno... a-afortunada...-susurró la mayor, incómoda ante la reacción de su amiga.

-... ¿afortunada?

La cara de Abigail se tornó confusa. Diamond sudaba nerviosa; probablemente la habría cagado ya. ¿Quizás se enfriaría la relación después de esto?

Sin embargo, y para su fortuna, no fue así:

-¡Oye, pues no sabía que eras bi! ¡Podrías habérmelo dicho, que he estado pensando todo este tiempo que eras hetero!

¿En serio se lo estaba tomando con tanta normalidad? La joven de pelo lila estaba sorprendida, nunca había visto a alguien que se lo tomase tan bien...

-V-vaya, pero, ¿no pasa nada? ¿Me vas a seguir queriendo s-siendo bi? ¡Aunque bueno, que tampoco lo tengo muy claro...!

-¡No seas tonta, si te gustan tanto los chicos como las chicas es porque eres bi! ¡Y claro que no pasa nada, no es una anormalidad ni nada! ¡Si mi hermano también es bi y trans! Y no pasa nada, mi familia y yo lo queremos igualmente.

Y justo en ese momento sonó el timbre que avisaba del fin del descanso. Las chicas comenzaron a recoger las cosas.

-Um... muchas gracias, Abby.- Dijo Diamond, sonriente y con su mochila a los hombros.

-¡Anda, no las des! Aceptarte como eres es algo que debería hacer todo el mundo. ¡Bueno, nos vemos luego, y quiero que me hables de esa crush! ¡Hasta luego! - y se fue corriendo, despidiéndose con la mano.

Diamond también salió de la cafetería, feliz de que su amiga la aceptase como es.