Siempre Es Mejor Volar

**Escapando**

Y hay estaba yo, corriendo como nunca en mi vida, con los ojos empañados de lágrimas, recordando como había empezado todo, y el porque había llegado a esta situación que sin duda jamás imagine, cuando vi a Alex corriendo tras de mi rogando que me quedara, no pude hacer mas que detenerme mirarlo y decir.
- Te quiero.
- Pero mamá, porque te iras?
- Aun eres algo pequeño, algún día lo sabrás, por ahora necesito que seas fuerte hijo, si? Hazlo por mi.
- No olvides volver y seguirme queriendo.
- Jamás te dejare de querer.

No pude evitar soltar una lágrima que denotaba lo duro que me daría dejar a mi pequeño en sus manos pero no me quedaba de otra, así que sin decir nada mas y soltando sus pequeñas manitas me fui, trataba de secar las lágrimas, pero esto solo empeoraba todo, no había nada que me hiciera sentir mejor por dejarlo, seguí caminando cada vez mis pasos eran mas largos y rápidos, llegue a un centro comercial, ya me había calmado un poco, como no había comido nada, decidí entrar a un restaurante que estaba en el fondo del centro comercial.
Me senté y revise las fotos de mi hijo en mi teléfono mientras esperaba que me tendieran, llego una chica, alta, bien presentada, ojos azules claros cabello como la melena de un leon, salvaje y hermoso, con una voz fuerte pero a la vez dulce pregunto ¿Que se te ofrece? 
Vocalizaba bastante bien, hablaba pausado pero no demasiado, tenia acento de venezolana, y eso no me molestaba en lo absoluto, siempre he sido de las que piensan de que debemos ayudarnos entre humanos ya que nunca sabemos como terminaremos nosotros, además he sufrido tanto con la humanidad que prefiero ser amable para que los demás no sufran, al menos que no sea por mi culpa, ordene un cordón blues con salsa de maracuya acompañando de una ensalada de tomate y cebolla con una salsa agridulce y unas papas fritas y para completar una limonada brasileña, luego de ordenar continúe revisando las fotos y editando algunas, ocasionalmente no podía evitar que ea lágrima cayera, cuando llego mi pedido, me lo comi sin prisa y con mucho gusto, hace mucho no probaba una comida tan deliciosa como está, vi a una familia llegar al restaurante y me hizo recordar que alguna vez yo tuve una familia como esa.

Esta es la primera parte de una historia que avanzara mucho y los dejara con suspenso, mezclara sus emociones, y si dejo de subir capítulos me querrán golpear, o al menos es mi esperanza. Que la historia avance y les encante...
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