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Hyun Hee despertó y se fue a bañar, como siempre hacía, sólo que ahora con una persona observándola.
Ya llevaban un año de novios, y había sido el mejor año de ambos. Su amor parecía no agotarse y siempre se mantenían estables, peleando muy pocas veces.
Volteó a ver a TaeHyung, sonriendo divertida con ambas cejas alzadas.
—¿Qué tengo en la cara? —preguntó, riendo al ver que TaeHyung seguía embobado—. ¡Hey! Te estoy hablando —puchereó, llamando la atención de su novio.
TaeHyung boqueó un poco, relamiendo sus labios mientras miraba el cuerpo de Hyun, el cual era tapado por la toalla.
Maldita toalla.
—Tienes tu belleza —comentó, guiñándole un ojo, haciendo que Hyun Hee riera.
Se vistió elegante, ya que TaeHyung le había dicho que irían a un lugar muy importante y bonito, después de todo, cumplían un año de ser novios.
Tomó un vestido color rosa, el cual tenía un muy lindo diseño que dejaba la piel de sus brazos expuestas de vez en cuando. Era sin tirantes y corto, quedando perfecto al cuerpo de Hyun.
Ese día también era un poco triste para Hyun, aunque ella era la única que conocía la razón. Ese día también cumplía un año sin ver a JeonGguk.
Desde el día que TaeHyung le había pedido ser su novia, la día siguiente había ido a la cada que compartía con JeonGguk, entrándose de muchas cosas impactantes.
JeonGguk había decidido que se separan, dejando de verse. Hyun lo entendía y respetaba su decisión después de todo.
Decidió despejar su cabeza de la tristes a que le inundaba a recordar ese día. Sonrió la espejo y bajó las escaleras, entrando a la cocina para preparar el desayuno de ella y TaeHyung.
Lamentablente, cuando entró a esta, su corazón se detuvo.
—¡No, no entres a la... cocina! —TaeHyung cerró los ojos, esperando lo peor.
—¡Kim TaeHyung! —gritó, enojada—, ¡¿qué te he dicho de traer a NamJoon a la casa cuando no estoy?! —gruñó. TaeHyung se quedó callado—. ¡Me rompió mi juguete! —apuntó a un auto pequeño, completamente desarmado.
—Lo siento —murmuró con un puchero. Hyun Hee suspiró y se acercó a él, alzándose en sus puntas de los pies para poder besar ese puchero.
—¿Por qué eres tan tierno? —agarró su nariz y la besó tiernamente—. ¿Nos vamos? —TaeHyung asintió y tomó la mano de Hyun Hee.
Antes de salir de la casa Hyun preparó un sándwich para ella y TaeHyung, guardándolos en su bolso. Finalmente salió y subió al auto junto a TaeHyung.
