Me siento aburrido después de estar casi cinco minutos frente al televisor con nada más que comerciales que parecen no tener fin. Hoy no hay futbol, mis amigos tienen otras cosas que hacer y Melissa decidió que pasaría las vacaciones en Ibiza mientras yo me quedaba aquí, en Londres. No la culpo, no tenemos una relación seria ni formal. Ni siquiera sé que es lo que realmente tenemos.
Pienso en la idea de visitar a mi madre pero sé que en el momento en que la vea comenzará a decir miles de cosas de cómo Melissa no es una chica para mí y a cuestionarme en cuanto a la carta que Jess me dejó encargado de entregar a Diane en el momento en que la viera nuevamente o me comunicara con ella.
Como si eso fuera a suceder.
Me acerco al ventanal que me brinda una genial vista de la zona y marco el número de Harry. Él no tiene novia y es probable que esté disponible para hacer algo. No responde y me rindo después de la cuarta llamada. Lo juzgué mal, tal vez mi amigo tiene una vida social muchísimo más activa que la mía. Entonces recuerdo al chico que conocí hace unos días afuera de la tienda de discos. Me pregunto si él tiene más suerte que yo y por fin convenció a esa chica que lo mantiene como mejor amigo para que salieran en una cita.
Busco el contacto que guardé como "Jacob A." en la lista. Cuando lo localizo presiono la tecla para llamar y espero en la línea.
— ¿Hum? —dice alguien y espero que sea Jacob al igual que espero que todo lo que diga no suene muy "gay" y el chico piense que quiero una cita con él. — ¿Hola? —vuelve a decir y eso afirma la teoría de que él pudo estar comiendo en esos momentos.
— ¿Jake? —pregunto tratando de sonar casual. —Soy Niall, me preguntaba si estabas ocupado ésta noche para ir por algo de beber. —casi golpeo mi cabeza contra en ventanal una vez que me doy cuenta de cómo sonó eso realmente. Jacob ríe por lo bajo.
—Estoy libre. ¿Es algo así como una cita? —dice y sonrío. Este tipo me cayó bien al instante que hablamos.
— ¿No crees que tu chica se enoje? —pregunto tratando de seguir la broma.
— Nah. Ella puede estar de acuerdo en compartir.
Suelto una carcajada.
— ¿Paso por ti en una hora?
— Claro cariño. —contesta y no puedo evitar reírme fuerte. —Me pondré guapo para ti. —estallo en risas nuevamente y él hace lo mismo. Permanecemos así un minuto.
—Nos vemos. —digo y él cuelga antes de que yo pueda añadir otra tontería a nuestra conversación.
(. . .)
Jacob silba en apreciación cuando ve mi vehículo. No lo culpo, yo también lo hice cuando lo vi en la agencia.
En el camino seguimos bromeando acerca de él enamorado de mi camioneta y yo haciendo el ridículo porque él me ha cambiado por ella y lo amenazo con salir con su chica. Entonces la seriedad reina el interior del auto.
—No quiero hablar de ello. Creo que lo mejor para mí sería dejar la lucha en este momento y buscar otra chica. —dice y yo asiento en comprensión. Soy un poco inestable cuando alguien saca a flote a Diane y la manera infame en la que decidió romper mi corazón. Sin embargo, el comienza a hablar aun cuando yo no le he pedido que lo haga. Me siento bien al saber que Jake tiene confianza en mí a pesar de que solo nos hemos visto un par de veces. —El día que volvió al departamento llego con un par de chicos. No es lo que piensas. —dice inmediatamente al ver mi expresión. —Son viejos amigos de ella, de su adolescencia. Creo. Fingió ante ellos que era su novio solo porque no quiso quedar en ridículo después de haberse defendido de qué había olvidado por completo al chico que terminó antes de mudarse.