La Noche Más Fría

La Noche Más Fría.

Ese cajón era prohibido, bajo ningún concepto debía ser abierto. En casa siempre estaban papá, mamá e hija. Vivían felices, vivían con risas y en su vecindario eran la familia ejemplar. Siempre seria así, mientras no hubiera ninguna botella de licor cerca de la madre. Ya que ella había sido rehabilitada anteriormente. Así transcurrían los años. Un día debido a un accidente el padre y esposo de la familia, falleció... Fue en el funeral dónde la esposa e hija, se enteraron que no era un viaje laboral, sino de placer con su amante... Una mujer alta de cabello rojizo artificial y una mirada profunda. Luego de todo aquel alboroto la madre recayó en las bebidas, el alcohol se convirtió en su mejor compañía.
Ya los días felices eran tristes, toda la luz se apagó.  Una noche fría después de que su hija le pidió que dejará el licor, cruzaron palabras, gritos, y llantos de desahogo los cuáles se escuchaban a pesar de los fuertes truenos.
La hija se acostó. La madre en medio de todo y su estado de embriaguez, fue al cajón y buscó el arma, la cargó y sin más a su hija le disparó. Hoy la madre vive y llora constantemente desde un rincón de la cárcel... Sólo recuerda el cabello rojizo natural de su hija y el último beso que también su hija  antes de dormir le brindó.