Mr. Pervert |BTS| •Vhope• [EN EDICIÓN]

DIECISÉIS

–L-lo siento Hobi hyung... y-yo tengo que irme– se arregló lo más que pudo, pero se seguía viendo como todo un desastre.

La ropa desarreglada, los cabellos revueltos, los labios rojos e hinchados, el cuello regado de hermosas marcas algo notables y un tierno sonrojo adornando sus mejillas. Sip. Sin dudas un bello desastre.

Hobi suspiró enamorado y se levantó del suelo quejándose en bajó porque le dolía su culito -desgraciadamente no de la forma en que quería- y se sentó en su cama. Vio al alfa tomar sus cosas para después encaminarse a la puerta, pero se detuvo frente a ella, el omega se confundió e iba a hablar pero sintió como unos labios besaban con timidez su mejilla derecha.

–No-nos vemos mañana Hoseokkie...– y después de una sonrisa abochornada junto a un enorme sonrojo, corrió hasta la puerta y se fue.

Taehyung salió de la casa de su ahora pareja y escuchó como éste pegó un chillido, algo así como "¡ME BESO! ¡ME BESOOO! ¡AAAAHHHHH! ¡SANTA RAMONA! ¡TENGO QUE CONTARSELO AL VECINO!" y después de eso solo se sonrojo más -si es que era posible- y se acordó que tenía que llegar rápido a su casa.

»Supongo que estoy en problemas...«

✖En otro lugar.✖

–Es lindo estar acá ¿no crees Yoongi hyung?– el delta respiro profundo y lo dulce llegó a su nariz.

¡Amaba el helado!

–¡Tsk! ¿qué tiene de bonito? me sacaron de MI cama y ahora el idiota de Jungkook no se apura con mi postre– decía entre gruñidos el omega viendo con odio a todos.

¿Por qué mierda lo sacaban ese día que lo tuvo tan estresante y que gracias a que tal vez le dieron un buen polvo a su maestro de literatura, no les dejo tarea?. En conclusión: podía dormir todo lo que quería y necesitaba. Pero sus alfas no querían lo mismo.

Jimin sonrió y rápidamente un llanto le llamo la atención; un bebé estaba llorando y su papi omega lo calmaba con suaves arrullos. Sonrió e inconcientemente llevo su regordeta y linda mano hacía la pansita del pálido. Este se sorprendió por el toque y Minnie al darse cuenta se sonrojo.

–J-Jimin– las mejillas del omega también se pintaron suavemente de rosa y el delta carraspeo desviando la mirada.

–L-lo siento hyung... no quise asustarlo– la forzada voz del rubio le hizo sentirse triste. Yoongi se había dado cuenta de que miraba su enanito y le sorprendió la reacción de él.

–Minnie... tú ¿quieres hijos?– se sentía tímido al hablar de esos temas pero necesitaba saber lo que atormentaba a su pareja.

Park sonrió de lado, su mirada se iba rompiendo y asintió fingiendo que todo estaba bien.
No quería desmoronarse ahí mismo delante de todos.

–Quisiera hyung... p-pero...– le costaba decir eso. Suga le veía atento y con un mal presentimiento.

–¿Pero?–

Jimin apretó los ojos, queriendo retener las lágrimas y volvió a "sonreír".

–So-soy estéril hyung... n-no puedo tener y tampoco engendrar bebés...– el murmulló quebró el acelerado corazón del de ojitos gatunos.

Min llevo una de sus manos a su boca y las lágrimas se hicieron presentes en su contra. Jimin se sorprendió y sintiendo que no aguantaría más para romperse también, se levantó y se fue de ahí. Suga le siguió y dejaron a un Jungkook encabronado, peleando y gruñendole a una viejita.

–¡Por la puta! ¡Por décima vez, YO llegué primero señora!– la venita saltada de la frente de Kookie estaba apunto de estallar.

–¡No me importa! ¡Yo quiero mi helado de cacahuate!– y seguía repitiendo lo mismo. Y Kookie estalló.

–¡A-LA-VERRR-GA!– salió de la fila y comenzó a buscar a sus parejas, no sin antes sacarle el dedo de en medio a esa doña. Quién le devolvió el gesto.

Cuando se dio cuenta de que sus hermosos bebés no estaban, gruñó afligido y salió del local de helados, sacó su teléfono decidido a llamar a Yoongi, pero su corazón se apretó, su lobo quiso salir por la desesperación y angustia que sentía, jadeo de dolor y al fin dejó de estar ahí parado como idiota comenzando a correr en dirección de donde su instinto lo llevaba.

Llegó a la linda y pequeña casita que compartía con su omega y delta, se adentro cerrando la puerta de golpe... necesitaba aserciorarse de que sus novios estuvieran bien. Subió las escaleras y se dirigió a la habitación principal encontrándose con un Jimin llorando y un Yoongi en peor estado que el primero.

Cosa que asustó más a su alfa, este olfato el aire y no había señal de algún olor diferente, uno donde le diera indicios de que ellos habían sido atacados; pero solo olía los aromas de ellos tres mezclados junto a rastros de tristeza y frustración.

Su lobo gruñó ordenándole que consolara a ambos, que los abrazara, besara y protegiera de todo lo que les atormentaba.
Jungkook hizo caso y se posicionó atrás de Minnie quien al sentir más fuerte el olor a eucalipto y chicle de menta se tranquilizó un poco. Sucediendo también con el omega.

Los tres se quedaron por un buen rato en esa manera; apoyándose, reconfortandose, dándose ocasionales y tiernos piquitos, esparciendo mimos y caricias. Dándose amor.

Entonces Jimin fue el primero en moverse posicionándose frente a su alfa y omega; suspiró y con una apaciguada y dulce sonrisa hablo despacio.

–Quiero un bebé, por favor...– eso sorprendió a Yoongi y Jungkook.

El segundo se fue de culo callendose al suelo y también dándose un buen madraso. Felicidades, ¡hoy era el día de caerse de la cama!

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