Capítulo 104 : Presidente Magno

243 14 0
                                    


Desde el recoveco de la ventana ingresa un tenue rayo de Sol el cual termina en mi ojo, comienzo a despertar y veo como Alice sigue aferrada tanto de mi como de Bianca, observo el reloj y ajusto la alarma del despertador. Vuelvo a dormir por otros 45 minutos, despertando antes de que la alarma suene de manera desmedida.

Tengo un problema, se ve tan cómoda durmiendo que no quiero interrumpir su descanso, siento una mano que toca mi cabeza y después señala el reloj de la pared. Suavemente toco el cabello de Alice para que comencemos un nuevo día.

Luego de media hora ya todos estamos duchados y listos para desayunar, he preferido hacerlo en mi casa y no en el comedor para que Alice no se sienta incomoda con tantas miradas fijas sobre nosotros.

Cuando estábamos por terminar siento el llamado de Melíades, me coloco de pie.

- ¿Señor Guille, que ocurre?

- Ha llegado tu regalo. "Invocación, Melíades"

Desde el suelo emerge mi Invocación con un atuendo similar al que ocupamos en la Universidad, solo que este cambia los pantalones por una falda con pliegues de color blanco. Es muy suave dado que fue confeccionada por las mismísimas Ninfas Del Bosque, quienes según las leyendas pueden usar la Seda De Gaia, según los relatos esta sería la seda más resistente y suave de todas las Dimensiones, además de que posee conciencia y se adapta a su dueño, de esta manera puede usarla tanto en su apariencia normal como cuando implementa Ilusión Corpórea.

Bianca ayudo a Alice a vestirse mientras yo esperaba junto a Melíades en el primer piso.

- ¿Cómo esta, es delicioso cierto?

- Amo, estos pasteles son increíbles, donde los consiguió.

Ante la pregunta de Melíades no puedo evitar sonreír de orgullo.

- Los preparó Bianca.

- ...

- Tan sorprendida estas.

- No es eso Amo, es que... Ya vienen.

Se escuchan los pasos que descienden por la escalera, nos volteamos a observarlas pero solo veo a Bianca.

- Alice, ¿no quieres que mi querido vea tu atuendo?

- Es solo que creo, que es demasiado para mí.

- Alice. ¿Me permites verte?

- ... Si Señor Guille.

Con suma timidez Alice se asoma y tanto yo como Melíades no pudimos evitar quedar enmudecidos por como luce.

- Que... hermosa. – Dice Melíades sorprendida.

- Eres resplandeciente Alice.

- Gra... gracias. – Dice con el rostro completamente rojo.

Melíades regresó a su Dimensión y nosotros emprendemos camino hacia el arco de piedra para activar el portal directo a la sala de clases. Cuando estábamos por llegar divisamos a una persona frente al arco de piedra, era la Maestra.

- Buenos días Alumno Griffin y Alumna Solut.

- Buenos días Maestra. – Respondemos.

- Buenos días... – Dice con un susurro Alice.

Dado que ella se escondió inmediatamente cuando vio una silueta frente al portal no era visible, asoma su cabeza por un costado de mi túnica, ella esta usando Ilusión Corpórea. La Maestra sonríe amablemente y se arrodilla frente a mí.

El Gran Reinicio Parte I : DespertarDonde viven las historias. Descúbrelo ahora