Si el bar hubiera tenido noches como aquélla más a menudo, habrían podido contratar a un abogado mejor para luchar contra el cierre del local. La gente se agolpaba en la barra pidiendo bebida y comida. Zeke, su cocinero, no dejaba de preparar los platos del limitado menú tan rápidamente como podía.
La música de los 3L parecía haber tenido un efecto llamada sobre los residentes de Kendall. Muchos de los asistentes eran clientes habituales antes de que comenzaran las obras de ampliación de la carretera. La Tentación no había estado tan abarrotada desde la primavera, cuando alguien hizo correr el falso rumor de que iba a realizar un concurso de camisetas mojadas.
Si eso hubiera ayudado a salvar el bar, Serena se habría planteado organizar el concurso.
—Creo que mataré a Lita cuando regrese, si es que regresa.
Serena colocó dos cervezas, un vodka con limón y un mojito en una bandeja y dirigió una sonrisa de conmiseración a Dinah, la camarera.
—Nadie de nosotras esperábamos que fuera a haber noches como ésta en nuestras últimas semanas antes de cerrar. Estoy segura de que Lita y Minako se hubieran quedado si hubieran sospechado que íbamos a tener esta multitud.
Serena estaba firmemente convencida de eso. Aún estaba enfadada con Minako por haberse marchado a fotografiar los incendios de los campos de California. Por otro lado, le alegraba que Minako hubiera ido allí y pudiera ayudar a su tía Jen, cuya casa había ardido en llamas. Además, Minako llevaba mucho tiempo diciendo lo mucho que le gustaría que una de sus fotos fuera portada de la revista para la que trabajaba, Century. Quizás ésa fuera su oportunidad. Así que, aunque Serena estaba molesta porque no estuviera a su lado, en el fondo se alegraba por ella.
Y en cuanto a Lita, la otra camarera... con ella nunca se sabía qué podía suceder. Había empezado a trabajar en La Tentación unos cuantos años antes para pagar su cuenta en el bar y ya no se había marchado de allí.
Lita era impredecible. Así que el que decidiera marcharse el martes de viaje porque había recibido una herencia no pilló a Serena de sorpresa. Por lo menos, Lita le había preguntado antes si le importaba que se fuera, e incluso le había ofrecido parte de su recién descubierta riqueza.
Serena no había aceptado el dinero, ya no iba a servirle de mucho. Pero sí que le había importado que su amiga se marchara. No tanto porque necesitara su ayuda, ni la de Minako, sino porque se había imaginado a las cuatro llorando juntas las últimas semanas antes de que el bar cerrara para siempre.
No les había dicho nada de eso a Lita ni a Minako. De hecho, había animado a Lita a que se fuera de viaje. En cuanto a Minako... después de su discusión no le había extrañado que su hermana se marchara.
Las echaba de menos, mucho más de lo que esperaba. Lo cual era una tontería, ya que ella era consciente de que más pronto o más tarde todo el mundo la abandonaba: sus abuelos, su padre, su madre, casada en segundas nupcias, su hermana...
Serena sabía que inevitablemente se quedaría sola, pero siempre había creído que al menos tendría elbar.
ESTÁS LEYENDO
TENTACION...
FanficAQUELLA MUJER SE RINDIÓ A LA TENTACIÓN QUE SUPONÍA AQUEL HOMBRE. Serena Tsukino era la más rebelde de la familia... hasta que tuvieron que cerrar el bar familiar y decidió que había llegado el momento de sentar la cabeza. Lo primero que tenía que ha...