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Pov Narrador || Contiene lemon

Hyunjin apoyó el frágil cuerpo de _____ sobre la barra de la cocina, causando un escalofrío en la muchacha cuando sintió el frío del mármol.

Sus manos se metieron debajo de la camiseta celeste que ella estaba usando, acariciando su tibia piel. _____ seguía perdida en los besos de Hyunjin, en sus hermosos y regordetes labios, en su cabello ya bastante largo y en las mordidas que el chico le proporcionaba de vez en cuando.

En un abrir y cerrar de ojos, Hwang le sacó la remera a la muchacha y viceversa. Ambos se quedaron por unos segundos admirando el cuerpo del contrario. Hyunjin observaba las perfectamente marcadas clavículas de la chica y sus bonitos y delicados pechos.

Acercó su mano a los labios de _____, acariciándolos un momento para luego insertar dos dedos en la boca de la pequeña. Ella sonrió con lujuría y los chupó energéticamente, regalándole sonrisas torcidas y varias miradas subidas de tono.

Hyunjin sacó sus dedos y bajó hasta el cuello de la muchacha, siguiendo con la vista el camino que recorría. Siguió y pasó por sus pechos y por su abdomen hasta llegar a la intimidad de _____. Besó salvajemente los labios contrarios a la vez que sus húmedos dedos jugueteaban sobre el short de la chica.

—Jinnie... —_____ hizo su mejor esfuerzo para hablar entre jadeos— ¿Podrías sacarlo? El short, digo.

Hwang rió y ayudó a su novia a sacarse la ropa que tanto le molestaba, incluso las braguitas rosadas. Su cuerpo era tan hermoso y sexy que Hyunjin podía venirse sin tocarse, sólo viendo lo provocativa que se veía _____ sobre la barra, con el cabello un tanto despeinado y solo el corpiño tapando un poquitito de piel.

El pelinegro subió una de sus manos por la espalda de la muchacha y desabrochó su sostén en un abrir y cerrar de ojos. Ahora la vista estaba completa.

Sin pensarlo dos veces, separó suavemente las piernas de _____ y se acercó, apoyando su erección sobre la intimidad de la muchacha. Con sus manos apretaba los botoncitos rosas que sobresalían exageradamente de los pechos de la extranjera. Hyunjin apoyó sus labios sobre la oreja de _____ y susurró con voz ronca.

—¿Podés notarlo, pricesa? —restregó su miembro y ella gimió levemente— Me estás poniendo muy duro, _____.

—Hyunjinnie...

—¿Sí, corazón?

—¿Cúando vas a hacerlo?

—¿Hacer qué? —Hwang simuló una estocada y la muchacha gimió sobre el oído del contrario.

—Eso.

—¿Esto? —varias estocadas más hicieron que _____ no aguantase más y cayera en el juego del mayor.

—Metérmela. Eso.

Hyunjin rió victorioso y se sacó la poca ropa que le quedaba luego de sacar un preservativo del bolsillo de su pantalón. Una vez hubo terminado de colocárselo, se acercó lo más que pudo a _____ e insertó su miembro en ella. La muchacha gimió un tanto más agudo que de costumbre y clavó sus delicadas uñas en la trabajada espalda del coreano.

Con el pasar de los minutos, las estocadas comenzaban a hacerse más y más fuertes; se escuchaban más y más jadeos y ruidos un tanto desagradables para quien pasase por la puerta del departamento.

_____ apenas podía aguantar todas las formas en las que Hyunjin estaba estimulándola. Sus labios lamían y mordían sus pezones, mientras que una de sus manos se deslizaba entre sus piernas para juguetear con su clítoris.

—Hyunjinnie —lo llamó y recibió una mirada cómplice del contrario—, estoy por venirme.

—Sí, mejor. ¿Vas a venirte para mi, princesa? —Hwang sonrió y se acercó a los labios de _____ para susurrar sobre ellos— ¿Vas a mojar mis dedos, corazón? —la muchacha asintió fugazmente a la vez que se abrazaba más al cuerpo del pelinegro— Y sabías que te amo con toda mi alma, ¿no?

_____ no pudo responder cuando sintió su cuerpo explotar de excitación. Al sentir como su miembro era apretado por las pequeñas paredes de la muchacha, Hwang no tardó mucho en venirse.

🌬

—Perdón por no haber sido muy tierno y meloso, princesa —Hyunjin se veía muy angustiado y comía lentamente.

—No tenés por qué pedirme perdón, me gustó.

El muchacho sonrió de costado y miró a _____, quien le regalaba una radiante sonrisa.

—Siempre decís que te gusta suave y que amás cuando voy despacito. Perdón, corazoncito hermoso, precioso, chiquitito.

—Está bien, Hyunjinnie.

Siguieron comiendo las milanesas un tanto quemadas en silencio, cada uno reviviendo en su interior lo que había pasado minutos atrás.

—_____  —el pelinegro captó la atención de la muchacha—, te amo muchísimo.

—Y yo a vos, Hyunjin. Yo también te amo muchísimo.





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Como vieron, cambié la portada uwu 💖🖤🤧

No sé por qué se me dio por escribir esto, pero ahí tienen ^^

Cuídense 🖤




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