"Leer es bueno para prevenir futuros clichés en la vida"
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Era una mañana cualquiera en la ciudad, los rayos del sol se asomaban por las cortinas de mi ventana, haciéndome imposible el poder conciliar mi sueño nuevamente.
Di un suspiro pesado, porque tenía que ir al instituto ese mismo día. Tanteando por sobre la mesita que se encontraba al lado de mi cama, tome mi celular y vi la hora. Para mi mala suerte aun eran las seis y media de la mañana.
-Hoy definitivamente me voy a morir de sueño- dije mientras frotaba mis ojos con mi antebrazo.
Con mucha flojera me revolví entre mis sabanas, intentando levantarme, pero todo esfuerzo era en vano, ya que a mi lado se encontraba echado mi obeso gato Mocchi.
Como tenia buenos ánimos de soportar este tipo de juegos matutinos por parte de este, simplemente lo deje dormir plácidamente y con mucho cuidado salí por la parte superior de mis sábanas.
Ya de pie me dispuse a buscar algo de ropa limpia, recogía algunas prendas del suelo y las olfateaba asegurándome al cien por ciento de que están aptas para usarlas ese mismo día, pero me percate que todas mis prendas estaban sucias o tenían pelo de gato encima de estas.
-Ni modo, hora del plan b- pensé mientras daba por vencida mi búsqueda.
Salí de mi habitación en dirección a la de mi hermana menor, la razón?, simple, le voy a pedir prestada ropa. Y he aquí varios puntos buenos en cuanto tener hermanas y más cuando se trata de June: uno, tiene mejor ropa que yo, es más variada en cuanto a esta; dos, somos de la misma talla tanto en calzado como en vestimentas; tres, sale más temprano que yo de la casa, añadiendo que en su colegio la obligan a ir correctamente uniformada todos los días; y por último, nos llevamos muy bien así que no creo que se moleste por pedirle indirectamente prestada su ropa.
Al regresar por mis cosas y mis zapatillas, me detuve un momento para ver mi reflejo en aquel espejo que se encontraba en medio de todo el pasillo y orgullosa de cómo me había vestido, seguí mi camino.
En resumen me había puesto unos pantalones negros, una camiseta color blanco, y una camisa a cuadros roja con negro. No es por ser egocéntrica ni nada por el estilo pero he de admitir que a mí me queda mejor que a ella, refiriéndome a sus cosas, debido a que ella aún no se desarrolló completamente en el ámbito de tener pechos o trasero, pero lo que envidiaba de ella es que al practicar deporte tiene más musculatura que grasa en el cuerpo, la razón es que ella sí es activa físicamente por el mismo hecho de es estar en la secundaria.
En fin, ya con todas mis cosas en mano y lista, opté por bajar a la cocina por algo de comer, porque al ser el camino de mi casa hasta el instituto un poco lejos, obviamente no iba a poder ingerir cualquier tipo de alimentos dentro de la próxima hora de viaje en el bus.
Ya en la primera planta, pasé por la puerta que dividía la cocina con la sala, encima de la mesa pude ver una pequeña bolsa de papel con algo asomarse que parecía una taza para bebidas calientes, un sándwich, y una nota que iba al lado de esta. Solté una pequeña risa y sin mucha prisa tome aquella nota, como era de esperarse, la había escrito mi hermana menor, supuse que fue antes de irse.
"Si me estás leyendo, ten en cuenta que soy una sensual nota, y estoy programada para auto destruirme dentro de los próximos 5 segundos... 5... 4... 3... 2... 1... pum!"
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Hot, Cold, Dumb & Dumber (HIATUS)
JugendliteraturDos personas distintas, y otras dos... bueno... compiten por quien es la más loca... cuatro chicos que nos presentan algunos días de sus vidas como una comedia. psdt: -Es mi primera novela narrativa, por lo que espero que comprendan si es mala tant...