AVENTURA EN CASA DE LOS ABUELOS.

Capitulo III

Que debería de hacer. Estaba confuso. Me quede en el sitio pensando. Pensé, y pensé, y pensé. Como ha esa edad entraba medio embobado pensé mal y se me ocurrió a la peor idea que aya existido en el universo. Tan tan mala que podría pasarme algo.
La idea era gastarme el dinero, pero no fue algo de provecho, si no que ir al burger land.

El burger land, como explicarlo. Es un sitio que tiene mil láminas de videojuegos u donde puedes comer pizza hasta rebentar.
Pensaréis: ¿Pero eso que tiene de malo?. Pues que este sitio está en la parte chunga de la ciudad a la que mi madre no me deja ir.

Pero me dejé ir y aunque, cada vez que me alejaba mas de la casa de mis abuelos camine, y camine, y camine, hasta que a mis espaldas escuche un voz que decía:
- He chaval a don vas.- Mire hacia atrás y pensé: " los que faltaban".
- Emmm...- Dije asustado.
- ¡ QUE A DONDE VAS !- Gritó. Aquel chico que me gritaba era el malote de la clase.
- Vo... Voy a... al burger land.- Le contesté tartamudeando.
- Que suerte. Yo también voy allí. Dame todo el dinero que tengas.- Dijo acercándose a mi sacándose tabas como si me fuera a pegar.

Mire a mi alrededor. Eché a correr calle abajo queriendo escapar de el. Miré hacia amante y allí estaba mi salvación: Un contenedor.
Una... Dos... y tres!! Salte al contenedor y le deje atrás.
Esperé un rato por si acaso y cuando creía que no había nadie  levanté la tapa y el susto que me di fue casi mortal. Allí estaba el malote que,  por si no lo he dicho antes se llama Harry.
- ¡QUE ME DES TODO TU DINERO!- Me mando haciendo el amago de como si me iba a pegar.
Enseguida saqué el dinero y se lo puse en la mano.
- Gracias. Y procura no volver a juntarle con migo.- Dijo sonriendo. Cerró la tapa de la basura con un fuerte golpe y me que a oscuras.