Capitulo 1.
¡Joder! Ya pensarla en mi cama abierta de pierna, gimiendo mi nombre, esos pechos ¡Mierda! Esos jugosos pechos que quiero probar, nunca en mi vida deseé tanto a una mujer como la estoy deseando ahora. Nunca podía fantasear tanto tiempo a una chica por la cuál me pone.
La odio.
¡Qué me la chupe!
<Bien que te gusta que te la chupen>
No jodan, es verdad.
Rodeo mis brazos en su cintura y la acerco más a mi para que sienta mi bulto en su precioso culo.
- ¿Ves cómo me pones? - Le susurro en su oreja.
Ella se dio vuelta con sus preciosos ojos celestes, su mirada se encontraba perdida y sus manos temblaban tímidamente.
- ¿Cómo te llamas, amor?-Pregunté tocando sus manos contra los míos.
- S-Skyller.- Tartamudeó.
Creo que tendré un orgasmo en este mismo momento.
Recorrí con mis manos su espalda hasta llegar a su precioso culo y ella soltó rápidamente mi mano.
- Se que te gusta, amor.-Susurré.
Su precioso culo me tienta, la follaría hasta dejarla inconsciente, me imagino sus labios tan carnosos alrededor de mi pene.
- No me digas amor. - Ella se alejó unos pasos hacia a mi.
Agarre la circunferencia de su muñeca, la acerqué a mi pecho y la sostuve de la cintura.
- Zack.- Le informé.- Baila conmigo.
Ella suspiró y sus dedos pequeños sostuvieron la palma de mi mano para después empujarlas hasta mi cintura.
- No Zack.- Dijo en voz baja.
¿Se hace a difícil? Bien que te gusta mirar mi precioso bulto, lo está mirando, dios, se está mordiendo el labio inferior ¡Qué no se muerda el labio inferior! Pasa su lengua por su labio inferior, joder, me tienta, sus pequeñas manos rodean mi bulto, dios mío.
Pero mi imaginación me juega una mala jugada.
¡Hijo de puta!
- Vamos nena,nos vamos a divertir.- La acerqué hacia a mi apreté mis labios en su oreja.- Te lo aseguro.- Susurré.
Ella solamente se quedo tensa entre mis brazos y se alejó de mi negando con la cabeza.
Puta.
Zorra.
Buenos pechos
Buen culo.
<Calmate>
Skyller me miró por ultima vez y ya no pude ver más sus ojos azules que tanto me gustaban, ella ya había desaparecido en la multitud de gente.
No me rendiré hasta tirarmela.
