¬Por favor follame Trevor. Mete tu polla en mi. !Por favor!. ¬ Trevor se separó con un gruñido de aprobación de mis piernas y en sus ojos se reflejaba lujuria, y al mismo tiempo autosuficiencia y satisfacción de ver como le rogaba.
Parece que esas palabras dieron en el clavo. Se separó de mí, sin quitar sus hermosos ojos verdes de los míos. El sonido que provocó al bajarse la cremallera, provocó una oleada de deseo y excitación, que crecía cada vez más entre mi estomago y mi sexo. Era una sensación nueva para mi. ¿Sería un orgasmo en proceso?. No lo sabré hasta que no me pase. Se bajó los vaqueros junto con sus boxers, justo lo necesario para liberar su polla.
¬¿Te gusta lo que ves nena?¬Me preguntó Trevor engreidamente, mientras alzaba una ceja y se masturbaba frente a mi.
Maldito cabrón arrogante. ¿Qué si me gustaba?. Ya estaba babeando por el. Es bastante grande y grueso, más que cualquiera con él que hubiera estado antes. Este hombre si que le dejará el listón bastante alto al siguiente.
¬Tomaré tu silencio como un sí, ya que no dejas de mirarlo preciosa. ¬Me sonroje. Es estúpido sabiendo que tengo las piernas abiertas para él, pero no pude evitar sonrojarme sabiendo que me cacho babeando por el.
¬¿Tienes un condón?. ¬ Le pregunté, mientras me pasaba la lengua por el labio inferior y luego lo mordisquee de forma provocadora. Ese fue mi, sí, a su pregunta anterior. Y sé que él lo entendió porque las pupilas de sus ojos se dilataron. El estaba igual de excitado que yo. Aunque el se estaba controlando más. Yo ya estaba jadeando.
¬Si nena, no te preocupes, tu solo disfruta y déjate llevar.¬ No le respondí. Asentí con la cabeza.
El se apodero con otro beso diferente a los primeros, pero no menos apasionado. Era un beso más tierno. Excitante y Salvaje al mismo tiempo. Así es como describiría este beso. Sentí como dirigía su polla entre mi sexo y empujaba poco a poco.
¬¡Joder nena!, estas muy mojada para mi, es muy rico saber eso. ¬Gemí sin contestarle, no sabía qué decir, y aunque supiera no podía hablar.
Mi mente estaba hecha un lió. Mis pensamientos están todos desordenados. Sólo quiero concentrarme en él, y en todas estas sensaciones que recorren mi cuerpo. Embistió una y otra vez, poco a poco, para poder entrar en mi sexo.
¬¡¡Joder, joder, joder preciosa!!. Estás demasiado apretada, es la mejor sensación que he tenido. Estar dentro de ti se sienta jodidamente bien. Relájate para que pueda meterte toda mi polla, falta poco preciosa, relájate. ¬Sus palabras sucias me hacían sentir cosquillas por todas partes. Hasta eso era nuevo para mi.
¬Trevor, no puedo. No me va a caber toda. La tienes demasiado grande.¬ Trevor soltó un gruñido de satisfacción ante mis palabras que salieron casi como un gemido, y su erección creció más y más dentro de mi.
¬Tranquila nena. Sólo relájate.¬ volvió a besarme mientras tenía una mano en mi cabeza como para no dejar que me aleje de su beso, y la otra mano la bajo entre nosotros, trazando circulos en mi clítoris.
Arquee mi espalda y gemí en su boca. El aprovecho este momento para entrar en una sola embestida por completo en mi. Jadee y gemí de dolor. Pero pronto se convirtió en puro placer. Sus embestidas cada vez eran más rápidas y fuertes. Estábamos sudando. Comenzó a trazar círculos con sus caderas mientras estaba dentro.
¬ Nena esto se siente jodidamente exquisito, pero no creo aguantar mucho más, ¿Estás a punto?.¬ Sus palabras me confundieron, y el seguro noto mi confusión, porque enseguida me dijo mientras me miraba a los ojos.
¬¿Tu orgasmo ya viene?¬Me encogí de hombros, y entre jadeos mientras el me seguía embistiendo, le conteste.
¬No sé. ¬ Sus pupilas se dilataron aún más mientras me preguntaba.
¬¿Nunca has tenido un orgasmo?.¬ Negué con la cabeza.
¬No nunca. ¬ Fue todo lo que dije. Antes de que el volviera a besarme de forma lenta y sin prisas, disminuyó el ritmo y la velocidad de sus embestidas. Apoyó su frente en la mía, mientras nos veíamos a los ojos. Tenía la mandíbula apretada. Sabía que estaba tratando de contenerse un poco más. Poco a poco hizo sus embestidas cada vez más profundas, podía sentirlo hasta el fondo de mi, mientras entraba y salía de una manera experta..
¬Déjate ir nena, relájate y cuando yo diga "ahora", los dos terminamos al mismo tiempo ¿Entendido?. Vas a tener un orgasmo te lo prometo.¬ Beso mi frente, y después retomo mis labios con otro beso salvaje.
Bajo una de sus manos entre nosotros e hizo círculos sobre mi clítoris, mismos que me obligaban a arquear la espalda, mientras él aceleró el ritmo de sus embestidas. Con cada embestida podía sentir un nudo de nervios entre mis piernas, creciendo más y más. Cerré mis ojos y eche mi cabeza hacía atrás.
¬No cierres los ojos nena. Mírame a mí. Quiero ver como te corres para mi. Toma todo de mi polla. Hasta la última gota preciosa. ¡¡AHORA!!.¬ Eso fue todo lo que necesito decir mientras pellizcaba un poco mi clítoris y tuve un orgasmo. Mi primer orgasmo.
¬¡Uhmm Trevor!¬ Gemí su nombre, casi en un susurro.
No estoy segura de si me escucho. Yo sólo sentí las contracciones de mi sexo y me perdí. Era una sensación que me dejó en el limbo. Me dejé caer sobre el. Abrazándolo. Mi cabeza estaba apoyada en su hombro. Solo podía escuchar los latidos de nuestros corazones. La vista se me nublo. A lo lejos escuche un gruñido que parecía ser mi nombre. Retumbó en las paredes. Podía oír las palabras que Trevor decía a mi oído, mientras acariciaba mi espalda de arriba a abajo. Pero, no se lo que dijo. No se cuanto tiempo llevamos encerrados en el baño. Seguro que llevamos casi media hora fuera, pero la sensación de tenerlo aún dentro de mi, es rica. No quiero separarme de él. No aún.
Como si leyera mis pensamientos, Trevor se separo de mi. Se subió los vaqueros guardando su miembro. Agarro mis bragas rotas y se las metió en la bolsa de sus vaqueros. Me ayudo a ponerme de pie, mientras él acomodaba mi vestido. Mis piernas estaban temblorosas. Estoy segura que si me suelta me caeré.
¬Nena tenemos que salir de aquí. Llevamos media hora fuera y seguro que ya se estarán preguntando dónde estamos. ¬De pronto algo cambió en su expresión, y continuo con un tono frío y distante.
¬Le voy a soltar, no va a caerse. Termine de arreglar su cabello. Tiene 5 minutos para llegar a la mesa con ellos. Yo llegare 10 minutos después y les diré que estaba atendiendo una llamada. Si le preguntan porque se tardó tanto, diga que estaba esperando que abrieran los baños. ¬Antes de que pudiera decirle algo, se salió.
Sentí una punzada de dolor en el pecho. Volvió a dirigirse a mí de usted como si nada hubiese pasado. Me decepcione, pero cuando me gire para verme al espejo olvide eso y ¡Waoh!. Sin duda necesito retocar mi maquillaje, y arreglar mi cabello. Tengo cara de recién follada. Estoy sonriendo como estúpida al espejo, y mis ojos tienen un brillo que nunca antes había visto. Aún no termino de asimilar lo que acabo de hacer. Apenas hace pocas horas estuve con Scott y ahora con Trev...
¬¡Mierda!. ¬ Scott está afuera esperándome con sus amigos y mis amigas.
¡Mierda, mierda, mierda!. Relájate Andrea y actúa con normalidad. Repetía esas palabras casi como un mantra mientras me dirigía a la mesa donde estaban todos esperando.
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Dos Hombres, Una Elección.
RomanceLo que Andrea Garcia pensaba que sería un fin de semana tranquilo, termina siendo una salida de antro con sus 2 mejores amigas. Con lo que ella no cuenta es que al conocer a dos hombres su vida está a punto de cambiar. Scott Cooper un sexy abogado e...