Corazón roto

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Que dramático suena el titulo....meh...espero que lo disfruten >w<

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—¿Estas bien Matthew?

Preguntó Alfred cuando los dos pensaron que sería mejor caminar el ultimo trayecto de regreso a casa. Estaban a diez minutos de esta y retrasarse un poco, estaría bien.

—Si.—Respondió Matthew mirando como la noche les hacía de compañera.—¿Qué tal tu?

Alfred se mordisqueó la mejilla pensando en una respuesta. No era sencillo responder con honestidad. No porque Alfred no quisiera decirle a Matt lo que sentía, si no, porque no sabía muy bien como decirlo.

—Eso creo.

—Al, lo si—

—Ni lo digas Matt.—Intervino Alfred sacudiendo la cabeza.—No quiero que te sientas responsable.

—Pero...

—Pero nada.

—Tal vez no fue lo mejor.—Alfred se detuvo y colocándose frente a su hermano, tomó sus mejillas y las pellizco.—¡AUAUAU! ¡Duele!

—De eso se trata, no es una caricia.—Dijo Alfred soltándole. Las mejillas de su hermano habían quedado de un rojo llamativo.—No quiero que vuelvas a decir que "Tal vez no fue lo mejor" ¡Fue lo mejor! Me alegra saber que tengo familia.

Matthew frunció el cejo al notar el semblante de Alfred después de decirlo.

—¿Te preocupa el señor Kirkland? —Cuestionó Matt.

Alfred hizo un mohín de disgusto.

—No lo sé.—Dijo honesto.

—¿Entonces, que es lo que te aflige? —Matthew lo interrogó con la mirada, preocupado más y más, a cada segundo que Alfred guardaba silencio.

—La verdad, no dejo de pensar en algunas cosas.—Contestó volviendo a la marcha, Matthew le siguió.—Estoy un poco enojado conmigo mismo. Porque, bueno...Arthur y Alice desde que recuerdo eran la única familia que tenía. A pesar de saber desde mis primeros años de raciocinio, que no era como ellos, nunca me plantee verdaderamente la posibilidad de tener a "alguien" más.—Resopló con tristeza.—Es decir, sí. Alguna vez le pregunté a Arthur sobre mis orígenes y su respuesta fue que fui "salvado" ...que ya no tenía por qué preocuparme ni temer. Estaba a su lado y eso me bastaba. —Alfred alzó la mirada y observó la espesa noche escarchada de estrellas.—Ahora que lo pienso...no me esforcé. No hice nada para encontrar la verdad. Me conforme.

Matthew contemplaba a su hermano.

—Alfred...creo que lo entiendo...pero no debes culparte. S—si el señor Kirkland te dio un hogar, su calor...entiendo porque...

—¡Pero me olvide de ti Matthew! —Soltó de pronto sorprendiéndole.—Lo siento.

—No, está bien, Al.

Alfred resopló de nuevo.

—No me preocupa que Arthur sepa que eres mi hermano. Él es muy listo, seguro ya sospecha algo.—Sonrió de una forma apagada.—Yo...lo siento Matthew...

—¿Por qué?

—Ahora pienso lo que tuviste que hacer para encontrarme.—Dijo y volvió a sonreír de esa forma apagada. Triste.—Seguramente te esforzaste mucho ¿No? Es decir...cruzaste el mundo literalmente para— ¡AUAUAUAUA! ¡¿Porque hiciste eso?! —Preguntó Alfred cuando Matthew pellizcó su mejilla tal como él había hecho hace poco.

Cría de DragonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora