Love and Money 2 z.m (español)

Capitulo 5 "No estoy casada"

Entre millones de lágrimas, me puse cómoda y trate de encontrar calor en la silla junto a la ventana, me limpiaba constantemente, en pleno invierno Nueva Jersey no era una gran idea, estábamos a pocos minutos de aterrizar, había salido de la casa en la mañana, minutos después de que Zayn hubiera salido a la empresa, las manos me temblaban cunado escribía la carta que le había dejado en el comedor, el corazón me latía a mil mientras empacaba la ropa y las lágrimas lograron ensuciar más de una camisa con el maquillaje de los ojos; una azafata nos informó que estábamos próximos a aterrizar lo que le hizo tomar conciencia de lo que hacía, sabiendo que lo más probable era que no tenía vuelta atrás.

Momentos después estaba esperando mis maletas, conecte el wi-fi, había millones de llamadas de Zayn, había un mensaje de iMessage de Zayn y otro de mi papá, me quite los guantes negros y los puse en el bolso para revisar los mensajes.

'¿Dónde estás? Estamos preocupados' era el de mi padre, no le pensaba responder, le podía decir a Zayn y era lo último que quería, nerviosa y ansiosa abrí el mensaje de Zayn.

'¿Estas bien? Dios, respóndeme, estoy preocupado por ti, vuelve, Al, vamos juntos en esto, toma tu tiempo pero vuelve, Al, vuelve' la lagrimas comenzaron a salirme, diablos había dejado a mi esposo. Miraba como todos tomaban sus maletas, muy lejos estaba la mía, las personas salían y se encontraban con familiares y amigos, otros salían y tomaban un taxi, yo estaba parada sin saber qué hacer ni que decir, estaba sola en esta ciudad, sola, sin saber a donde ir, ni que hacer, no sabía que iba a hacer con mi vida.

Mi maleta llego y con el mínimo esfuerzo la tome, se me quebró una uña al intentar tomar la segunda, con mis maletas a los lados me decidí por responder el mensaje, sabiendo aun así que no estaba en mis planes.

'Estoy bien' así de simple, presione enviar, me dio escalofrió pensar en cómo estaría él, guarde el iPhone y tome las maletas, arrastrándolas pase las puertas, el cambio de ambiente fue drástico, hacia frío, y había mucho ruido, las personas abrían paso al verme con esas grandes maletas, mi iPhone comenzó a vibrar, una vez afuera pare y saque el iPhone, era otro mensaje de Zayn.

'¿Dónde estás amor?' era algo que no le quería responder, y no lo haría, bloquee el iPhone y comencé a guardarlo en el bolso, pero alguien hizo caer mi maleta, increíble.

Deje el iPhone en el bolso y de mal humor me gire a ver, un hombre estaba tratando de volver a poner la maleta.

-Lo siento -dijo y me miro, era alto, con cabello castaño y ojos claros, tenía al redor de 25 años, era muy guapo.

-No hay problema -le dije teniendo la maleta que recién tumbaba.

Él frío, mi ansiedad y nervios no eran una buena mezcla, mis manos habían perdido el calor de los guantes negros, simplemente no dejaban de temblar mientras trataba de parecer una mujer segura.

-Llevas muchas cosas, es realmente pesada para tu tamaño, y dos, ¿Cómo diablos llevas eso sola? -le sonreí y me reí tratando de relajarme, viviría aquí de ahora en adelante, son Zayn, diablos, sin el calor de Zayn.

-Te acostumbras -comenzó a mirar las maletas y sonrió.

-Soy Joe Flynn -Joe me tendió su mano derecha y la acepte, llevaba el anillo y él lo noto, que gran diamante el que llevaba, mi favorito de todos los que guardaba.

-Alison Parnell -le sonreí nuevamente y escondí la mano con agilidad.

-¿Es tu Parnell o es el Parnell de tu esposo? -Joe alzo las cejas y no aparto la vista de mi cara.

-Es mío, no estoy casada -le dije fingiendo una amplia sonrisa.

Era mi próximo futuro, no iba a estar casada, como dolían esas palabras.

-No todas las mujeres tienen ese anillo sin estar casadas -Joe seguía sorprendido y sin creerme.

-Me gusta la joyería, ya te dije, no estoy casada -volví a sonreírle y el asintió.

-Siendo así, ¿Por qué no te llevo a donde debas ir y salimos a tomar un café? -Joe tomo una de mi maleta como si hubiera leído mi pensamiento.

-Suena bien -le sonreí y tome la otra maleta.

Me levante de la cama, sintiéndome enfermo, me limite a mirar por la ventana, el sol daba en toda la cama, me tire sobre ella y mire la mesa de noche de la derecha, estaba el portarretratos, lo tome y la ira me subió, Alison había visto el mensaje, se estaba a empeñando en que no la encontrara y eso me destruía. Mire la foto de los dos y la tire al suelo dejando que se quebrara mientras las lágrimas de ira comenzaban a salir.

Debía distraerme en el día, no podía pasar cada día en las mismas paredes pensando en ella, entre en el baño e imágenes de ella se me vinieron a la mente, el día en el auditorio, cuando después de tanto insistir se decidió por besarme, cuando la encontré en el bar, el día que nos casamos, las veces que nos sentábamos en el mueble a conversar y terminábamos riéndonos, todas las idas al hospital; me mire en el espejo, apreté la mandíbula e imágenes de ella me seguían persiguiendo, ella solía usar mis camisas para dormir, solía despertarse con el pelo en un nudo de tanto moverse, di un puño sobre el lava manos, era débil cuando de ella se trataba, era jodidamente débil, ella se había ido y con ella mi vida, este lugar no iba a ayer el mismo sin su presencia. Entre a bañarme, no dejaba de pensar en ella, cada movimiento que daba me recordaba a Al.

Me vestí y salí del apartamento, fui directo al trabajo, subí hasta el último piso y todo iba como siempre, como si ella no hubiera desaparecido. Las personas iban quedándose en los pisos hasta que llegue solo al último, al cruzar las puertas vi a Anne sentada en el escritorio con una revista, al mirarme la cerró.

-Buenos días, señor Malik

-Anne, no va a volver, vas a ser mi secretaria, no sé por cuanto -Anne abrió los ojos con sorpresa y entre a mi oficina, mas fotos, no las quite, venía a trabajar no a lamentarme sobre lo que había pasado, revise mis mensajes, no había respondido, gran vida la mía, me decidí por salir y quedarme con Anne firmando todo y revisando los nuevos contratos y las nuevas hojas de vida que habían llegado, esto lo hacía Alison, no sabía cuales elegir, me volvería loco haciendo esto.