Capítulo 2

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En el cementerio encontró las tumbas de sus padres y abuelos, no es que tuviera mucha relación con sus abuelos paternos pero igual los sintió. No había rastros de sus hermanos pero por las fechas era obvio que no nacieron, Harry lloró desesperado, culpaba al cambio físico abrupto, por eso sus emociones estaban a flor de piel.

Ya más calmado, meditó su situación, recordó que el texto que estaba traduciendo hablaba sobre cambios de tiempo. Sinceramente tradujo en automático y no puso atención en lo que escribía, un mal hábito que Severus siempre criticaba. Lo primero sería obtener información, transfiguró su ropa en una túnica larga con capucha y colocó a su felino amigo en un bolsillo sobre su corazón, levantó su varita como pidiendo un taxi y apareció un autobús de 2 pisos, subió pagando el boleto y se recostó en una de las camas. Anteriormente había viajado en el autobús Noctambulo y sabía que el conductor manejaba como loco, sino se estaba atento se podía rodar por el pasillo o quedar plasmado contra una ventana, si este autobús era igual lo mejor sería una cama a falta de un asiento con cinturones de seguridad.

En el Caldero Chorreante se hizo de una copia del diario, «12 de julio de 1992», eso quería decir que él tendría cerca de 12 años, su cumpleaños era el 31 faltan pocos días. En la biblioteca buscó las copias anteriores del diario para informarse de la situación sociopolítica, las cosas eran algo diferentes que en su mundo, porque sí, ese no era su mundo, tenía que ser una dimensión paralela. Los libros dieron una idea de los sucedido con sus padres y con su alter ego, en ese mundo el mago oscuro reinante se llamaba Voldemort, él solo conocía a un Voldemort y era un profesor muy popular por sus libros sobre Defensa Mágica, Tomas Riddle fue su profesor por 3 años cuando comenzó Hogwarts y utilizaba el seudónimo de Voldemort cuando escribía.

Según la información los Potter tenían un hijo, Harry James, la noche del 31 de octubre de 1981 fueron atacados en su casa. James y Lily Potter murieron víctimas de la maldición asesina, su hijo en cambio sobrevivió a ella eliminando al Lord oscuro, siendo conocido desde entonces como el niño que vivió, se desconocía su residencia. Henry pensó que era ridículo que adjudicaran a un bebé de meses la hazaña de eliminar a alguien de quizás ¿50 o 60 años?, además culpaban a su padrino Sirius Black de traición, para colmo estaba en Azkaban sin juicio previo, es decir que no hubo investigación o una sentencia. Por más que buscó no había noticias de juicio alguno, diarios posteriores informaban el ingreso del niño Potter a la escuela...

Henry se retiró de la biblioteca con muchas preguntas, estaba oscureciendo y debía conseguir refugio, todavía guardaba su carpa entre sus cosas, esperaba no haberla dejado en otra parte. La suerte lo favoreció y encontró un parque dónde podía pasar de ser percibido entre los árboles.
A la mañana siguiente guardó su carpa y cambió su ropa, decidido a saber sobre su otro yo. Comenzaría la búsqueda por las direcciones conocidas de su familia y amigos, primero iría con su tía Petunia luego a casa de su tío Greg, si no estaba ahí tal vez en casa de su madrina Marlene, de estar ahí trataría de preguntarle que pasó con su esposo, por qué permitió que Sirius fuera preso, después ya vería por donde más ir.

Llegó al número 4 de Privet Drive, en Little Whinging (Surrey), se aplicó sobre sí un hechizo de invisibilidad y espero. Su tío buscó el periódico que estaba frente a la puerta de entrada, dejándola abierta mientras alejaba a un perro que hacia sus necesidades en su césped, ante esto Harry aprovechó la oportunidad y entró, oculto se deslizó lentamente por la planta baja y luego subió recordando el escalón flojo, no sabía si sería el mismo pero se arriesgó. Dudley estaba roncando, se veía muy gordo, las otras habitaciones estaban libres, la de invitados estaba mal decorada, su tía nunca usaría tanta flor en el papel tapiz, ni tanto rosa. Escuchó unos pasos y se ocultó tras una puerta, su tía trataba de despertar a su hijo para que bajara a desayunar. Harry escuchó el quejido de su primo y bajó, minutos después escuchó lo más espantoso que pudo haber oído, algo tan insólito e increíble que jamás creyó escuchar de boca de su tía.

Tras la Puerta (Pausada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora