La rutina cansa y lo cansado a Anne le parece aburrido, y odia lo aburrido, y Mike no soporta que Anne odie algo.
Aunque no hablen.
Aunque no se besen.
Y así es como la rutina empezó a cambiar.
De un libro a un libro y Ed Sheeran.
De Ed Sheeran y libro a Ed y café para él , té para ella.
De merienda, lectura y canciones a un gesto delicado de cabeza como saludo, a un beso en la mejilla, y al primer Hola.
Lo dijo ella. Porque en esta relación el lanzado nunca será él. Él le contestó mas tarde, cuando pisaron la cafetería y Anne empezaba a preocuparse ante su silencio común y extraño. Lo susurró, quizá para su mismo, aunque no estoy segura.
Ella sonrió, y no hablaron mas, porque las palabras arruinan los momentos.