"¿Qué es lo normal?".
Michel Foucault hablaba del concepto Normalidad. Normal es lo que hay que hacer, un comportamiento que una sociedad considera como propio. Pero lo que aqui es normal puede que no lo sea en otro país, o lo que ahora encontramos normal no lo fuera hace 10 años, o a lo mejor no lo sea dentro de un año.
Foucault era homosexual y en su época la homosexualidad se consideraba anormal (casi como una mala palabra). La exclusión social que sufrió le hizo poner todo su talento al servicio de una demostración que es más actual que nunca. La confusión de lo que es normal y lo que es correcto. Porque ¿quien pone los límites de la Normalidad? (O sea entre la normalidad y la anormalidad).
Según Foucault la normalidad implica una relación de poder.
El poder
•Clasifica
•Ordena
•Controla
•Decide lo que es correcto en cada momento.
El que se sale de esa corrección resulta extraño. La idea de lo que hacemos tiene que ser aceptado por los demás provoca incluso, que muchas personas se escondan facetas o rarezas suyas.El poder reprime, establece lo que está bien y lo que está mal. Esa es la manera más usual en la que pensamos el poder. Nosotros pensamos al poder en términos negativos, tecnologías negativas del poder.
¿Qué significa esto?
Que siempre pensamos que el poder viene
•A sujetarnos
•A reprimirnos
•A censurarnos
Así pensamos a la sexualidad, desde lo que Foucault llama la hipótesis represiva.
El libro "la historia de la sexualidad" se va a pelear con esa idea que seguramente casi todos tenemos a priori, que es que la sexualidad siempre la vivimos, socialmente, de modo reprimido."De sexo no se puede hablar; el sexo tiene que ver con una zona íntima que hay que cubrir."
•En la escuela si hablas de más de sexo te callan.
Foucault dice: "Nunca se ha hablado más sobre sexo que ahora". El tema es cómo, y cuando comenzamos a entender como se habla sobre sexo empezamos a comprender que el problema no es que no hay que hablar de sexo, sino que terminamos hablando de la sexualidad de una única manera, la manera que se normaliza.
En cada programa de televisión que vemos hay escenas de sexo, en cada revista leemos a cerca de lo que es una vida sexual plena, hasta en las posiciones sexuales hay una definición del por donde hay que vivir la sexualidad como una sexualidad correcta.
Frente a la hipótesis represiva lo que Foucault presenta en "historia de la sexualidad" es el dispositivo de la sexualidad a partir del cual se genera una explosión discursiva. Dice que por un lado a todos se nos habré como el apetito de querer saber la voluntad de saber de sexo, pero en realidad también da medio vergüenza, ¿no?.¿Se imaginan yendo en subte con un libro que dice: "Diez recetas para aprender a gozar mucho más la vida sexual"? LO MIRAN MAL.
Sexo hay en todos lados y, sin embargo, que loco, ¿no?. Seguimos con la hipótesis represiva en la cabeza .
Ahora -dice Foucault- no sólo queremos saber todo sobre sexo, sino que hay algo más. El sexo sabe todo de nosotros. Se supone que comprendiendo
•Nuestros pruritos sexuales
•Nuestras limitaciones
•Nuestros deseos y Fantasías
Comprendemos nuestra subjetividad.
Bueno, El psicoanálisis se ha dedicado a eso.
Ahora, ¿Porque se supone que nuestros gustos sexuales explican lo que somos? Porque detrás hay un dispositivo hermenéutico que el psicoanálisis ha sabido expresar muy bien, que no es más que una de las tantas formas de comprender nuestra relación con el placer y con nosotros mismos. Tal vez, la mejor manera de comprender este abordaje que hace Foucault es entender que cuando se normalizan prácticas sexuales, cuando se normaliza una sociedad que habla todo el tiempo de la sexualidad, también se normalizan sus propias anomalías.