Como comenzó todo

Capítulo 3

Al llegar "el día", solo puedo sentir nerviosismo, como si todas mis ganas de querer ir y cumplir mi sueño de hacer boxeo se fueron al drenaje en la rapidez de un rayo, así que solo me queda esperar mientras pasan las horas en el bendito colegio. Mientras estoy sentada viendo jugar a los niños, otros conversan animadamente, bailan, comen y hacen cualquier cosa para aprovechar el tiempo libre, me dedico a pensar en todo lo que implica que alguien te llame la atención, desde conversar algo tan simple como: "¿Les gusto la clase señorita?", hasta quedar con la sensación de que te atrae un poco más. ¿Que tienes Pablo y la conchalalora que me vuelves loca?. Mientras estoy a punto de volver a sumergirme en mis pensamientos, siento como alguien se tira sobre mi haciendo que casi caigamos al suelo.

-¡Que mierda!- digo

Era la Isabella, maldita bataclana que hace que casi nos vayamos al otro lado con diosito

-¿Que pasa amiga?- Me dice mirándome atentamente, un poco preocupada

-Nada, osea estaba pensando en el Pablo, pero no hay mucho que decir- Digo suspirando, volviendo a centrar mi atención hacia la nada

-Pucha Julietita, tan rápido y ya andas suspirando por el Tontito. Solo tienes que esperar a que vayas hoy a la clase, además el boxeo es algo que siempre te ha gustado, ¿Porque cambiarlo ahora?, siempre va a haber alguien que te llame la atención, solo que tu debes aprender a manejar eso y no cualquier hueon te haga suspirar- Dice seriamente

Aaaaaaaaay Isabella, por algo te adoro, tienes toda la razón, me dejo llevar muy rápido cuando solamente lo he visto una puta vez, te creo si llevara un mes o un poco más, pero solamente podré saberlo hoy

-Gracias amiga, tienes razón, solo me queda esperar y ver que sucede- Le digo sonriendo y abrazandola fuertemente

Al terminar las clases que pasan más rápido de lo normal, vamos conversando con los chiquillos de la semana y ver si salíamos a algún lado

-Yo digo que vayamos al cerro- Dice la Isabella intentando motivarnos

-Nooo, que paja, a menos que vayamos en teleférico, porque no sé si podría subir todo el cerro, a pesar de que haya camino de pavimento- Dice la Emma

-No sean flojos po- Dice la Isabella, mirándonos con cara de "molesta"

-Ya vamos, por último vamos caminando hasta donde podamos y luego el resto lo subimos en el teleférico, además piensen que nuestra recompensa será el mote con huesillo que hay arriba (Sorry niñas pero yo AMO el mote con huesillo, es por lo único que subo al cerro, bueno igual porque me gusta subir, pero es mi propósito secreto)

-Yaaa, yo apoyo a la juli, además podemos llevar cosas para hacer un picnic por ahí, también podríamos ir al parque japonés si es que me quieren acompañar, además que me gustaría invitar al Bastián, ¿Me dejan?- Dice mirándonos a todas un poco avergonzado

Si niñas, mi amigo le encanta la corneta igual que a todos nosotros, lo descubrimos desde siempre ya que le encantaba la Avril Lavigne y tiene una pequeña obsesión con las chinas, pero lo amamos igual, además que a la emma también le gusta, así que los dos se complementan muy bien, mientras nosotras con la Isa nos apoyamos y escuchamos nuestra music teniendo una pequeña locura por el mijito rico de Luis jara, mentira, nicagando ando detrás de cornetas arrugadas, sorry Luchito, yo estoy un poco loca por el Pablo alboran, quizá por eso me llama la atención el Pablo, pero debo admitir que los dos están bien buenos, mejor me callo.

Al despedirnos todos y coordinar que el viernes vamos a ir al cerro, me encamino a mi bendita casa para cambiarme de ropa y esperar para ir a boxeo, aprovecho de caminar un poco y dejar mi mente a un lado, apenas llego, toco la puerta y mi mamá me abre con un gran sonrisa